- El Comité Nacional de Prevención del Tabaquismo (CNPT) ha propuesto duplicar el precio de la cajetilla del tabaco hasta los 10 euros e ir aumentándolo progresivamente hasta los 20 euros para que España deje de ser “el estanco de Europa”. Así lo ha expuesto el presidente del CNPT, Andrés Zamorano, en una rueda de prensa convocada con motivo del Día Mundial sin Tabaco que se celebra cada 31 de mayo y en la que ha vuelto a urgir al Gobierno a que apruebe “de manera inmediata” el Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo 2021-2025.

“Estamos muy sorprendidos y muy enfadados: pensábamos que hoy era el día tope para hacer coincidir el Día Mundial sin Tabaco y la presentación del plan, que será el germen de la nueva ley antitabaco que el Gobierno se ha comprometido a aprobar esta legislatura, pero esta legislatura acaba el año que viene”, lamentó.

Un plan que -añadió-, además de ampliar los espacios sin humo o introducir el empaquetado neutro, debe incluir un incremento de la fiscalidad de los productos del tabaco y sus derivados, incluyendo los cigarrillos electrónicos.

De esta forma, el CNPT propone duplicar el precio de la cajetilla hasta los 10 euros y después, de forma paulatina, hasta los 20 euros, para que así España, donde más barato resulta acceder al tabaco tras los países del este, Grecia, Chipre, Malta y Portugal, “deje de ser el estanco de Europa”. En este sentido, el coordinador el programa de Doctorado en Economía y Empresa en UNED, José María Labeaga señaló que el precio medio final de una cajetilla en nuestro país es de 4,53 euros frente a los 9,7 de Francia o los 13 de Irlanda.

¿Supera lo recaudado los gastos que genera el tabaco? En 2021, España ingresó, entre IVA e impuestos especiales, 9.300 millones de euros, pero los costes asociados, tanto internos como internos, se triplicaron hasta casi 30.000, explicó.

No obstante, Labeaga puntualizó que hay que ser “cuidadosos” con la actualización de la fiscalidad para evitar la fuga a productos sustitutivos de las cajetillas, como la picadura y los cigarrillos electrónicos.

“Los efectos de sustitución han sido muy visibles entre 2006 y 2017: la venta de cajetillas cayó un 47 % pero la picadura de liar aumentó un 171 %. Si no coordinamos estas medidas fiscales bien, podrían no ser efectivas”, advirtió. El profesor también pidió desterrar otro de los mitos que es el prejuicio a la industria y a la agricultura. “Hay 35.000 puestos de trabajo relacionados directa o indirectamente con la producción de tabaco, incluyendo la industria, la agricultura y la expendiduría”.

Por su parte, Mónica Pérez-Ríos, coordinadora del grupo de tabaquismo de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE), recalcó que, a pesar de la normativa que lo prohibió en 2010, “la prevalencia de exposición al humo ambiental aún sigue siendo un contaminante de interiores”.

600 millones de árboles. Según datos de la OMS, la industria del tabaco cuesta cada año más de 8 millones de vidas humanas, 600 millones de árboles, 200.000 hectáreas de tierra, 22.000 millones de toneladas de agua y 84 millones de toneladas de CO2. “La mayor parte del tabaco se cultiva en países de ingresos bajos y medios, donde el agua y las tierras de cultivo son desesperadamente necesarias para producir alimentos para la zona. En lugar de ello, se utilizan para cultivar las mortíferas plantas de tabaco”, critica el organismo en su informe Tabaco: Envenenando nuestro planeta. La OMS destaca que la huella de carbono del tabaco equivale a una quinta parte del CO2 producido por las aerolíneas comerciales.