Una fatigada, pero satisfecha con el resultado, Maitane Melero reconocía al término de la prueba no haber llevado la planificación que le hubiera gustado para preparar la San Silvestre, donde reeditó triunfo después de imponerse en la del año pasado, así como el ritmo alto que le exigieron sus principales rivales.

“Son ritmos muy rápidos y no me podía descuidar, que la juventud viene pisando muy fuerte. De hecho Raquel es medallista en su categoría de 1.500 y yo sabía que no me la podía jugar al final con chicas como Raquel. Ainara ha hecho al final muy bien, quedando tercera. Tenía que ir rápido desde el principio, pero no sabía cómo estaba de ritmo porque llevo unas semanas complicadas en las que no he podido llevar la planificación que me hubiera gustado. Era un test para mí, para ver cómo estaba y al final ha salido bien. No estaba acostumbrada, me faltaban este tipo de esfuerzos”, comenzó valorando Melero.

En cuanto a los siguientes retos, la atleta de Grupompleo Pamplona Atlético explicó que “si esta carrera me salía bien, lo más seguro es que fuera a Valencia, al 10 kilómetros. Creo que probaré a modo de test en Valencia y luego quería hacer media maratón en Sevilla, pero creo que no voy a llegar e igual retraso hasta Barcelona, que es en febrero”.

Por último, Melero quiso “agradecer a la organización, a los voluntarios que hacen posible que salga esta carrera y al público, que esta carrera es súper especial por el ambiente que se crea. Es una gozada volver a esta normalidad y disfrutar de lo que es la San Silvestre”.