Exkal (Exposición y Conservación en Alimentos, SA) va a generar unos 500 puestos de trabajo en su planta de Marcilla en los próximos cinco años. Actualmente esta factoría suma 870 empleados, y con el nuevo proyecto la plantilla alcanzará casi los 1.400 asalariados en un lustro.

La compañía, de la familia Antoñanzas, prevé una inversión de 25 millones hasta 2028 para ampliar sus actuales instalaciones, con el objetivo de poner marcha nuevas líneas. Con ello, el fabricante de muebles de refrigeración comercial aumentará la producción y competitividad. Además contempla destinar parte de esa cantidad a realizar reformas para optimizar los consumos energéticos.

El Gobierno de Navarra ha aprobado este miércoles en su sesión esta iniciativa de inversión de interés foral para acelerar los trámites y permitir facilitar con más rapidez el desarrollo de este plan, como así ha anunciado el vicepresidente y portavoz en funciones, Javier Remírez, durante la rueda de prensa posterior. "La declaración de interés foral simplifica la tramitación administrativa con un impulso preferente y urgente hasta concluir la inversión", ha señalado.

Desde hace 18 años

En 2005 surgió Exkal como empresa familiar, con voluntad de implantar la tecnología en el mercado de la refrigeración global. Actualmente lidera este sector en España, con una cuota de mercado superior al 40%, al suministrar a 19 de las 20 principales empresas de distribución alimentaria.

Su mayor centro productivo está en Marcilla, aunque tiene fábricas en Paterna y Marines (Valencia), y Haian (China). Emplea a 1.200 personas, 870 de ellas en Marcilla, y su facturación anual asciende a 200 millones.

Además de Exkal, el Gobierno también ha declarado inversión de interés foral  la explotación minera en Artesiaga, impulsada por Magnesitas de Navarra (Magna), con un desembolso de 18 millones y el mantenimiento de 240 puestos de trabajo; y la empresa de reciente constitución Urrizmendi, especializada en la fabricación de alambrón de aluminio, con un desembolso de 8,5 millones y la generación de 20 empleos.

"Única opción para mantener la actividad en Navarra"

Magna va a invertir 18 millones en una mina de magnesita -mineral que escasea- en la zona de Artesiaga (Esteribar-Baztan). El Ejecutivo aclara en una nota que esta mina es "clave por la compañía del grupo Roullier al convertirse en la única opción para mantener la actividad en Navarra”.

La empresa emplea a 240 personas (más de la mitad vinculadas a estos valles del Pirineo) y el empleo indirecto se calcula en el doble de personas. Además comercializa mineral por 103 millones de euros al año, casi el 80% al mercado exterior.

"El proyecto planteado por la empresa aporta, además, un plan para favorecer a la ganadería extensiva, que devolverá la zona recuperada de la actividad minera con una restauración simultánea y aumentar la capacidad de acogida del pastizal de Erliz y sus aledaños", señala la nota del Gobierno. En Europa los yacimientos de magnesita explotables se ubican en Eslovaquia, Grecia, Austria y España, que engloban el 6% de la producción mundial.

Para desarrollo de energías renovables

El tercer proyecto se ubica en Uharte-Arakil. Promovido por la empresa recién constituida Urrizmendi, se denomina industria de fabricación de alambrón de aluminio, imprescindible para el desarrollo de las energías renovables en la extensión de nuevas líneas eléctricas o en el refuerzo de las existentes.

La futura Urrizmendi se ubicará en el polígono Sargaitz de la localidad, en una parcela contigua a la que ocupa la empresa Trefilados de Navarra. Prevé generar 20 empleos y el volumen de inversión asciende a 8,5 millones.

Esta organización trabajará en dos procesos: la fundición del aluminio, procedente de lingotes adquiridos o bien de chatarra comprada o recuperada del rechazo de sus actividades; y el laminado del material para obtener formas y piezas comerciales o bajo diseño especial.