Un ataque aéreo conjunto del Mando Militar de Estados Unidos en África (AFRICOM) con el Ejército somalí mató el pasado sábado a, al menos, 13 combatientes del grupo terrorista Al Shabab en el centro de Somalia, anunciaron los medios de comunicación estatales.

"El número de terroristas muertos de Al Shabab, que fueron asesinados este sábado en un ataque aéreo en la región de Hiiran (centro), ha aumentado a 13", confirmaron a última hora del pasado domingo los medios de comunicación estatales de Somalia, citando a fuentes militares.

Según recogieron los medios locales, este fue el cuarto ataque aéreo de las tropas estadounidenses contra Al Shabab en suelo somalí en lo que va de mes.

El pasado 16 de mayo, un día después de que Somalia celebrase sus últimas elecciones presidenciales, el mandatario estadounidense, Joe Biden, ordenó el despliegue de centenares de soldados en suelo somalí para luchar de una forma más eficaz contra Al Shabab.

El presidente somalí, Hassan Sheikh Mohamud, vencedor de esos comicios, agradeció a Washington esa decisión.

Priorizar la protección de los civiles

Desde entonces, organizaciones como Human Rights Watch (HRW) exigen a EEUU priorizar la protección de los civiles somalíes durante sus operaciones militares, ya que en el pasado sus acciones ocasionaron en el país una "pérdida considerable de vidas civiles (...), incluidos en ataques que fueron aparentes violaciones de las leyes de la guerra".

Al Shabab, grupo que se afilió en 2012 a la red Al Qaeda, perpetra a menudo ataques terroristas en la capital somalí, Mogadiscio, y otros puntos del país para derrocar al Gobierno central e instaurar por la fuerza un Estado islámico de corte wahabí (ultraconservador).

Los yihadistas controlan algunas partes de Somalia.

Somalia vive un conflicto armado desde el derrocamiento en 1991 del dictador Mohamed Siad Barre, que dejó al país sin Gobierno efectivo y a merced de señores la guerra y milicias islamistas.