El bebé neozelandés cuyos padres se negaban a que recibiera transfusiones de sangre de donantes vacunados contra la covid-19 fue operado del corazón con éxito este viernes en la ciudad de Auckland, en medio de fuertes medidas de seguridad alrededor del hospital en donde se realizó la intervención.

La abogada antivacunas Sue Grey dijo hoy que los padres del menor - que sufre el estrechamiento de una válvula del corazón - le comunicaron que la operación ya culminó y que el menor, a quien pudieron ver tras el procedimiento quirúrgico, se encuentra bien.

"Todos están agotados y (los padres) se sienten aliviados de que haya salido bien de la operación", expresó Grey, quien representa a los progenitores del menor, al diario New Zealand Herald.

Si bien las autoridades sanitarias informaron que no darán detalles de la operación debido a razones éticas y de privacidad, el director interino de los servicios sanitarios de Auckland, Mike Shepherd, declaró a la prensa que la prioridad es trabajar junto a la familia en favor de la recuperación del menor.

La operación del bebé se produjo en medio de una protesta de más de medio centenar de activistas antivacunas que se congregaron a las afueras del hospital de Auckland para pedir que no tuviera lugar.

Sheperd también confirmó que uno de los manifestantes entró sin autorización al hospital, por lo que la Policía y los guardias de seguridad redoblaron la vigilancia de sus instalaciones, publicó por su lado, Radio New Zealand.

La noche anterior, los progenitores del bebé se negaron a entregarlo al personal médico para las pruebas previas a la operación, por lo que fue necesaria la intervención de la Policía.

La operación de este bebé de pocos meses ha concitado la atención mundial a raíz de la batalla judicial que enfrentó a sus padres con el sistema de Salud neozelandés, que pidió la semana pasada la tutela del menor para operarlo.

Si bien los padres no se oponían a la operación y reconocían la urgencia de esta, ellos habían propuesto su propia lista de donantes de sangre entre personas que no han sido vacunadas contra la covid-19.

Pero, las donaciones de sangre en Nueva Zelanda son gestionadas por NZ Blood, un organismo oficial que durante la recolección no pide a las personas indicar si están vacunados contra la covid-19 y asegura que no existen pruebas de que la sangre de personas vacunadas suponga un riesgo añadido.

El miércoles, un juez del Tribunal Superior de Auckland determinó que la justicia se hiciera cargo de la tutela parcial del menor hasta el 31 de enero de 2023, para proceder a la operación y hasta que culmine los tratamientos post-operatorios.

El juez Ian Gault, que escuchó a las partes el martes, determinó que el bebé debía ser operado sin demora y otorgó a los médicos la potestad de determinar sobre las transfusiones de sangre.