El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, jurará este sábado el cargo para un tercer mandato, con el que sumará cinco años a sus ya dos décadas en el poder, en una ceremonia en la que se espera la presencia de una veintena de líderes internacionales.

Cuando termine este tercer mandato, en 2028, Erdogan habrá ocupado la jefatura del Estado catorce años, más los once que ejerció previamente como primer ministro, lo que le convierte en el líder que más tiempo ha ocupado el poder en Turquía.

La ceremonia de investidura empezará a las 14.00 h (11.00 GMT) en el Parlamento y continuará dos horas y media más tarde en el palacio presidencial, con la presencia esperada de una veintena de dirigentes internacionales.

Entre los jefes de Estado extranjeros que asistirán a la ceremonia destaca el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que aterrizó hoy en Ankara, en lo que es su quinta visita a Turquía desde que asumió la jefatura del Estado.

También está confirmada la asistencia del primer ministro de Armenia, Nikol Pashanián, un presencia llamativa dada la lentitud de los intentos de reconciliación entre Ankara y Yereván que están en marcha desde 2021.

Se espera asimismo, según la prensa turca, al presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, uno de los mejores aliados de Erdogan, así como los jefes de Estado o Gobierno de Hungría, Catar, Somalia, Argelia, Ruanda y varios países balcánicos.

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha confirmado su asistencia, señalando que viajará el sábado a Ankara para asistir a la ceremonia y mantener reuniones bilaterales con Erdogan y otros altos cargos, en una visita que se prolongará hasta el domingo.

Turquía y Hungría son los únicos socios de la OTAN que no han ratificado aún el acceso de Suecia a la alianza militar, un asunto que podría ser abordado en las citadas reuniones.

Erdogan llegó al cargo de primer ministro en 2003, después de que su partido, el islamista AKP, ganara las elecciones de 2001 y, tras renovar su cargo dos veces, pasó a ser elegido presidente en 2014, por primera vez por sufragio directo, gracias a una reciente reforma constitucional.

Pese a que el cargo exigía neutralidad, Erdogan siguió dirigiendo la política turca desde la Presidencia y finalmente legalizó esta situación mediante un referéndum en 2017, que abolió la figura del primer ministro y otorga al presidente todo el poder ejecutivo.

Tras revalidar el cargo en 2018, Erdogan se quedó en el 49,5 % de los votos en la primera vuelta el 14 de mayo pasado y finalmente ganó en segunda vuelta con el 52,2 %.