El fuerte viento reinante en Tudela durante toda la tarde y las fuertes críticas al equipo de gobierno de Navarra Suma en el Ayuntamiento de Tudela (que preside Alejandro Toquero al que denominaron el “Ayuso tudelano”) fueron los protagonistas de un accidentado Paloteado de San Juan en el Barrio de Lourdes. Cuando se estaban recitando unos versos sobre la actitud del alcalde al censurar al escritor tudelano Carlos Aurensanz, un fuerte golpe de aire tiró una torre de focos que iluminaban el escenario hiriendo a dos personas del público que fueron trasladados por Protección Civil a una ambulancia para su inspección. Una de estas personas, al menos, sangraba por la cabeza, aunque pudo ir andado ella misma a la ambulancia.
Ese hecho conmocionó a las cerca de 400 personas que observaba el Paloteado que aún se asustaron más cuando de nuevo el aire tiró la otra torre de focos, si bien esta segunda pudo ser sujetada y no hirió a nadie. El hecho detuvo el Paloteado que, tras unos momentos de incertidumbre siguió con su representación
El paloteado
Como es habitual la representación del Paloteado del Barrio de Lourdes sirvió para sacar los colores a la gestión del Ayuntamiento, sea quien sea quien gobierne. Antes de iniciarse, el mayoral (Carlos Romano) quiso reflexionar sobre las críticas en redes sociales, “veo crispación y confrontación. Todos somos vecinos y vecinas. Se puede criticar y el Paloteado es una critica constructiva pero en las redes solo veo critica destructiva y en especial a gente que de forma altruista trata de mejorar Tudela. Este Paloteado va para aquellos voluntarios que se organizan para mejorar Tudela. Querámonos más en Tudela”, dijo sin rimar y en tono serio.
En lo que respecta a las críticas a la gestión municipal no dejaron pasar ninguna de las polémicas abiertas por el alcalde Alejandro Toquero. Desde su intento por retirar la palabra “chupinazo” de la página web para poner “cohete” (“¿Qué más da? lo importante es que se disfrute ¿Qué va a ser los siguiente quitarlo del diccionario? Alejandro Toquero, que se te ve el plumero”, le espetó el Rabadán), hasta el incremento de las luces de Navidad (“Tudela por fin lució con gran pompa y estilo y casi le hago sombra al alcalde de Vigo”, dijo el personaje del alcalde), pasando por la colocación de las luces en el estadio, los 200.000 euros en indemnizaciones a trabajadores despedidos o los 2.500 euros por la bandera de Tudela en el paseo de Pamplona (“2.500 euros ha pagado por la bandera, me parece innecesario para ser un trozo de tela”, le espetó La Pepa).
También se criticó al Ayuntamiento por el olvido de los hosteleros y comercios durante la pandemia y lo difícil que es aparcar en la capital ribera. En este último aspecto, el diablo encabezó una lucha de autos de choque que estuvo acompañada de la canción Ay Mamá de Rigoberta Bandini, adaptada con la letra criticando la dificultad de aparcar en la ciudad y que terminaba gritando “¡Está muy claro que al final lo que nos queda es andar, andar, andar!”.
Tampoco quedó sin tocar la llegada de la reina Leticia. Emulando a Gila, el Rabadán hizo como si hablar con el Rey Emérito, al que le aconsejaba “no robar tanto y no ser tan campechano”, al tiempo que le pedía que “haga feliz a Tudela, cada 15 ó 20 días nos mande a su nuera, cada vez por una zona, tranquilo que no habrá chillos, así mejoran las calles y plazas de los vecinos”.
La Pepa recordó que “lo evidente es que en Cultura, Tudela está dejada, muchos pueblos nos supera de largo, Ribaforada. Alarmante es la caída de calidad cultural, no hay casi oferta en teatro ni variedad musical, por no hablar de la nefasta gestión de Cultura ya que el ambiente laboral fue una gran tortura”. Igualmente también le recordaron que “al polémico Soto, Merche Añón contrató y a ese machista xenófobo nuestro dinero entregó. Menos mal que nuestro pueblo la espalda le quiso dar y una de las funciones tuvo que anular”.
