- A finales de mayo quince vecinos mostraban su satisacción por el trabajo realizado en auzolan, un jardín que ahora han destrozado por completo durante los dos últimos fines de semana. Se trataba del proyecto Lorategiak auzolanean, que puso en marcha el Ayuntamiento con la intención de “crear jardines floridos, llenos de insectos, con tres criterios elementales: bajo consumo de agua y bajo mantenimiento; criterios ecológicos en su planteamiento, ejecución y posterior mantenimiento y con diversidad de plantas, de floraciones bellas y prolongadas que atraigan todo tipo de insectos polinizadores, pájaros...”.

Los vecinos recibieron clases teóricas y prácticas guiadas por Juan Mari Artazkoz y Fulgen Sutil, y crearon el jardín en la calle Julio Caro Baroja, un espacio que ahora está destrozado. “Las personas que hemos trabajado en auzolan queremos hacer hincapié en la necesidad de reflexionar sobre lo comunitario y lo público. Un grupo que estaba de fiesta ha destrozado el jardín los dos últimos fines de semana. En la noche del viernes al sábado de las fiestas de Altzate, por segunda vez, han deshecho el jardín, el destrozo ha sido total”.Recuerdan que lo ocurrido este fin de semana “no es nuevo. Cada vez que hay fiestas aparecen destrozados el mobiliario urbano, los contenedores, las señales de tráfico y las flores de los jardines y de particulares. En esta ocasión le ha tocado al jardín que con tanto cariño y trabajo habíamos levantado y no podemos ni entenderlo ni aceptarlo. En euskera hay una frase que dice que el burro de todos, se muere de hambre. Pues no estamos dispuestas a aceptarlo. Queremos reivindicar que, si el burro es de todas las personas, lo debemos cuidar en comunidad”.Estas personas también tienen palabras para “quienes con tanta valentía han desmantelado el jardín, les pedimos que con la misma osadía den la cara y muestren voluntad para reparar el daño, trabajando en auzolan, rehaciendo el jardín. Eso sí sería actuar con civismo. Y también pedimos la implicación de la ciudadanía, para que hable en la cuadrilla, educando en casa, y haciendo ver que el cuidado de los recursos que son de todas las personas nos atañe a todas. Y denunciando actitudes como éstas”. l

El grupo señala que “el problema no es nuevo, cada vez que hay fiestas aparecen destrozon y en esta ocasión le ha tocado al jardín que con tanto cariño y trabajo habíamos levantado y no podemos entenderlo ni aceptarlo”.