“Por un servicio de calidad”, contra la “política de recorte de personal” y para criticar la “falta de diálogo con el equipo de Gobierno”, miembros de la plantilla de la Policía Municipal de Burlada se han concentrado este jueves por la tarde frente a las puertas del Ayuntamiento mientras se celebraba el pleno para reclamar soluciones. Tal y como han indicado en un comunicado, el número de efectivos prestando servicio “está por debajo de los mínimos que se acordaron con el Consistorio por culpa de la negativa del equipo de Gobierno de alcanzar un acuerdo satisfactorio para ambas partes”, situación que “se ha visto agravada por la política de recorte de personal” en una población que ya ha superado los 20.000 habitantes, donde desde el mes de septiembre “se han eliminado turnos de noche, dejando a una población acostumbrada a una respuesta ágil y cercana con una grabación en el contestador de Policía en el que se les indica que llamen al 112”.

Denuncian el cierre el cierre de la Oficina de Atención a la Ciudadanía de Policía “la mayor parte de los turnos, la no recogida de denuncias penales y el inevitable aumento de la inseguridad ciudadana”. Se ha pasado de 35 policías a 29, señalan, y critican que la propuesta de Navarra Suma pasa por, “en lugar de convocar plazas de agentes, la contratación temporal de auxiliares de Policía, precisamente cuando en todas las Administraciones Públicas, incluido este Ayuntamiento, se está llevando a cabo la estabilización de plazas para acabar con la temporalidad en el empleo público”. 

Gestión deportiva

Durante el pleno se ha debatido sobre la creación de secciones de los ya extinguidos patronatos de Cultura y fiestas y Deportes, que han criticado desde la oposición, más en el caso de la sección de Erripagaña que han censurado desde EH Bildu señalando la "inacción sobre el futuro administrativo del barrio" por parte de Navarra Suma. Por otra parte, todos los grupos a excepción de este último han suscrito una moción para que el Ayuntamiento “tome cartas en el asunto” en favor de unas condiciones dignas y buscar una solución “inmediata y urgente” al conflicto con los y las trabajadoras de la gestión deportiva, que llevan 70 días en huelga. Desde el equipo de Gobierno han señalado que "no tenemos nada que apoyar porque ya lo tenemos todo hecho".