- La semana pasada se conocía que Kide, la emblemática juguetería de la calle Tafalla cerrará el día 30 de junio después de casi medio siglo de andadura, y a partir de ahí han ido sucediéndose las noticias de comercios que, en plena pandemia todavía, bajan la persiana o que, simplemente, no la han levantado días atrás cuando ya se permitió tras el confinamiento. Se está viendo en el centro de Pamplona, y con especial virulencia en el Casco Viejo y el Ensanche, las zonas con más actividad comercial de la ciudad. En unos casos, los negocios no han encontrado relevo generacional y, en otros, por ejemplo, los dos meses de inactividad que ha supuesto el covid han acabado por poner la puntilla a una situación ya de por sí complicada.

Los carteles de Liquidación por cierre lucen ya en algunos comercios del II Ensanche, que en determinadas calles se vienen a sumar a los de Se Alquila o Se Vende, que ya venían colgando en otras bajeras cercanas. Varios ejemplos, cerró Carolina Herrera en la avenida Baja Navarra, 9, con más de una década de andadura en la capital, y cerró Trucco, otro histórico establecimiento de Carlos III, 57. En la misma avenida, también echó el cierre la firma Shunglass Hut de gafas, y antes de la pandemia cesó su actividad en Carlos III 48 la franquicia Fútbol Emotion y 4x4 en la calle San Fermín. En la esquina de Roncesvalles con Paulino Caballero cuelga el cartel de liquidación por cierre la joyería Javier Echeverría, si bien ayer su propietario precisó que se trata de un cambio de ciudad: "Nos vamos a San Sebastián", dijo y añadió que el traslado ya estaba en marcha desde febrero: "Somos la tercera generación de joyeros, llevamos 30 años en Pamplona, y en este local los últimos 8", por lo que reconoció que se van "con una pena tremenda".

Otros que se marcharon antes son Calzados Valverde, que cerró por jubilación en Castillo de Maya, y en García Castañón, 12 cesó recientemente la zapatería Muroexe. Más arriba, en la calle González Tablas, hoy es el último día abierta al público de la Colchonería Buenas Noches, después de una trayectoria de veinte años. Desde el establecimiento, María comentó ayer a este periódico que "cerramos por el virus y por la crisis". Explicó que las ventas comenzaron a ir mal desde octubre o noviembre, "pero esto último ha sido la puntilla", añadió. La colchonería puso en liquidación todo el género hace unos días y "hemos podido liquidar muy bien, no nos queda casi nada". Hoy será el último día de ventas, aunque la semana que viene aún seguirán en funcionamiento para repartos. Justo en frente, cesó su actividad un centro de manicura, y al lado de la colchonería, en el 2 de González Tablas, bajó la persiana a finales del año pasado la zapatería Dos Pasos, en este caso por jubilación.

María Jesús Alonso es gerente de Ensanche Área Comercial, la asociación de comerciantes y hosteleros que está trabajando sin descanso para reimpulsar la actividad de sus asociados en la durísima vuelta tras la pandemia. Alonso reconoce que la situación del comercio no era buena en los últimos años, y "ahora lo que faltaba para rematar la crisis era el covid". A esto hay que añadir "que tras estar dos meses cerrados, para recuperar lo perdido, con el nivel de ventas que está habiendo se hace muy difícil".

Ante esta situación, Alonso apela a la implicación de los ciudadanos, "sobre todo, a la gente joven que está acostumbrada a comprar todo on line. Tienen que saber que hoy en día cualquier marca la pueden encontrar en el comercio de Pamplona y todos tenemos que implicarnos, porque el consumo que realizamos revierte en la ciudad y revierte en todos".

A pesar de que los cierres son una realidad, Chus Alonso precisa que los comerciantes que siguen en activo "están esperanzados, porque desde que se empezó a abrir a comienzos de junio la afluencia de público está siendo superior a lo que pensaban". Porque, según añade, el comercio está "echando el resto para afrontar esta situación". Lo hizo durante la pandemia, cuando muchos de ellos aprovecharon para formarse en nuevas tecnologías, darse a conocer en las redes sociales y dar el salto a la venta on line, y lo sigue haciendo ahora, cuando han tenido que readaptar sus negocios "y garantizar la mayor seguridad a sus clientes".

Alonso valora también muy positivamente las nuevas aperturas que se están produciendo en el barrio. El 5 de junio abrió el negocio de moda Nakar en la calle Bergamín, ayer mismo echó a andar el restaurante asiático de la cadena Udon, en la calle Amaya, antiguo local de Piedad, y está también en marcha un gimnasio en la calle Tudela.

Abiertos por San Fermín. El escenario va a ser totalmente novedoso. Pamplona sin celebrar San Fermín y con todo el comercio abierto en la primera quincena de julio, cuando siempre aprovechaban para cogerse vacaciones. Chus Alonso, de Ensanche Área Comercial, señala que en la nueva realidad el comercio está "la mayoría por abrir" en San Fermín y así poder contrarrestar los dos meses sin actividad. Y piensan en alguna campaña dinamizadora y contar con la ayuda de las instituciones.

"El comercio está echando el resto pero la ciudadanía debe implicarse"

Ensanche Área Comercial