Navarra ha publicado este viernes el estudio de seroprevalencia realizado entre el 26 de abril y el 3 de junio. Los resultados evidencian que la covid, pese a que sigue haciendo daño, está bajo control y dejan un dato especialmente esperanzador: el 97,4% de la población tiene anticuerpos frente a la covid, bien por haberse vacunado o por haber superado la infección. Esto significa que casi la totalidad de la ciudadanía goza de protección y que en el supuesto de ser positivo por coronavirus en la mayoría de los casos lo superará sin padecer grandes complicaciones.

Es sin duda una grandísima noticia, pese a que para alcanzar esta elevada inmunidad colectiva hayan tenido que transcurrir casi dos años y medio desde que se registró el primer positivo por esta enfermedad. Hay que seguir insistiendo en que estamos ante un escenario que no elimina el riesgo de contagio ni de transmisión, si bien lo normal es que cada vez estos sean más leves y con síntomas parecidos a los del catarro. No obstante, la situación epidemiológica obliga a seguir protegiéndose. Entre otras razones para contribuir a detener la propagación de una enfermedad que sigue castigando a los más vulnerables y porque no toda la población tiene el mismo grado de inmunmidad. De acuerdo con este trabajo, en el que han participado 1.461 personas, aproximadamente el 70% de los menores de 30 años tiene la doble inmunidad –por vacuna y por infección– como también disfrutan de ella todos los grupos de edad menores de 60. Pero no sucede lo mismo precisamente en los que ya han cumplido los 60 años. Al tratarse de una franja poblacional que se ha infectado en menor medida, su inmunidad es solo vacunal en más de la mitad de los casos. De hecho, el estudio estima que casi dos tercios de la población (el 62%) tiene anticuerpos por haber pasado la infección, pero se trata de un porcentaje que llega al 80% en los menores de 30 años pero desciende progresivamente y se queda en el 26% en los mayores de 80 años. El estudio también pone de manifiesto la eficacia de la vacuna y la conveniencia de administrar una cuarta dosis a partir del próximo otoño. Debe tenerse presente que la covid continúa siendo una amenaza real sobre todo para las personas que superan los 65 años y es una obligación de todos contribuir a frenar esta pandemia.