La consejera de Cultura y Deporte del Gobierno de Navarra, Rebeca Esnaola, ha manifestado en el pleno del Parlamento que no comparten "en absoluto" la retirada de banderas sobre las que no consta ninguna prohibición que se produjo el pasado 14 de enero en el estadio de El Sadar en el partido de Osasuna ante el Mallorca.
En respuesta a una pregunta de EH Bildu en el pleno del Parlamento, Esnaola ha explicado que está pendiente de conocer las conclusiones de una investigación interna puesta en marcha por la junta directiva del club. Y ha mostrado la disposición del Ejecutivo foral de participar en esta investigación "si es preciso". Además, ha precisado que el Gobierno de Navarra "carece de competencias para actuar en labores de control y seguridad" en El Sadar, lo que corresponde a un coordinador de seguridad.
Rebeca Esnaola ha destacado que el Gobierno foral "está trabajando para mejorar el clima de convivencia en nuestra comunidad" y "generar una sociedad más tolerante, abierta, participativa y crítica desde el respeto al diferente. Para ello, ha añadido, el deporte es un "recurso magnífico".
Por su parte, el parlamentario de EH Bildu Maiorga Ramírez ha considerado que el Gobierno de Navarra debería tener una "actitud mucho mas proactiva" en esta cuestión, ya que "la vulneración de la libertad de expresión no es una cuestión interna de un club". Ante "cualquier vulneración de derechos la actitud de las instituciones debe ser absolutamente exigente y poner medidas", ha remarcado Ramírez, que ha recordado que El Sadar es una "infraestructura del Gobierno de Navarra".
Ha afirmado, además, que esta situación "no es algo nuevo" y los "cacheos" y retirada de "algunas enseñas" son "ya habituales". Algo que "nos debe alarmar a todos". "Se ha producido una absoluta arbitrariedad" en El Sadar, ha criticado Ramírez, que ha considerado que el Ejecutivo "debe implicarse en esa investigación" y "pedir responsabilidades".
En esta línea ha instado al Ejecutivo a que tenga una "actitud absolutamente responsable con las conclusiones" del informe del club y, si se constatase que fueron el mando de la Policía Nacional o el director de seguridad del club quienes dieron la instrucción, "deberá pedírseles responsabilidades o cesarlos".
Esta situación, ha comentado, "no es algo nuevo" y existen precedentes como la criminalización mediante multas de símbolos como el Arrano Betltza, decisiones que son "absolutamente arbitrarias" dependientes de quién esté al mando.
