Osasuna se ha clasificado por quinta vez en su historia para disputar una competición europea. Después de haber jugado en la Copa de la UEFA –asimilable a la actual Liga Europa– y haber participado en una eliminatoria previa en la Liga de Campeones, al conjunto rojillo le tocará debutar en la Liga Conferencia, el tercer torneo continental que premia con su participación a los equipos entre los primeros clasificados de todas las ligas de Europa.

Los agoreros ya aseguran males terribles por haber metido el morro en Europa y por las exigencias de añadir más partidos al calendario, pero también forma parte del desarrollo de un equipo y su crecimiento participar en estas andanzas, y más cuando son inusuales. Además, episodios históricos e inolvidables se han tejido junto a partidos con rivales de fuera.

147

Fotos de la celebración de Osasuna: Budimir, Abde, Arrasate... Oskar Montero

La primera participación fue en la temporada 85-86 con Iván Brzic en el banquillo. El debut en Europa fue contra el Glasgow Rangers. En el partido en El Sadar, el antiguo Sadar con muchas localidades de a pie, se registró la entrada más numerosa en un encuentro en el estadio pamplonés: 25.596 espectadores según los datos facilitados por el club en ese momento –es decir, toda la capacidad del estadio con el personal bien apretado– El debut continental se produjo el 18 de septiembre de 1985 en un feudo histórico como Ibrox Park y el primer partido continental en El Sadar fue el 2 de octubre de 1985. El gran Patxi Rípodas fue, es, el primer goleador de Osasuna con su gol en El Sadar a los escoceses –los rojillos ganaron 2-0 con un tanto suyo y otro Martín–.

La segunda clasificación para la UEFA tuvo también su emoción y, además, le regaló a Osasuna momentos para la gloria y rivales de primer nivel que le hicieron sentir el brillo y fuste de la competición. Osasuna –entrenado por Pedro Mari Zabalza– liquidó en la primera ronda al Slavia de Sofía, un rival de segundo orden que sólo causó algunos problemas en la ida –del equipo búlgaro fichó Osasuna a continuación a Diian Angelov–, dejó a continuación la noche mágica de Stuttgart, donde los rojillos ganaron 2-3 al que ese curso iba a terminar como campeón de la Bundesliga –en sus filas militaban internacionales como Buchwald, Frontzek o Maurizio Gaudino–, y se despidió de su participación del torneo cayendo ante el Ajax.

El equipo neerlandés estaba entrenado entonces por un prometedor técnico, Louis Van Gaal, y en sus filas militaban tipos que iban a hacerse notar en el fútbol continental en mayor o menor medida. Dennis Bergkamp –mito después del Arsenal– fue el autor de los dos goles de la eliminatoria, pero junto a él estaban futbolistas como el meta Menzo, Danny Blind, Frank de Boer, Aaron Winter, Wim Jonk o Davids. Van der Sar era el portero suplente y otros hombres como Marcianus Vink, Silooy o el internacional danés Pettersson tenían también habitualmente su entrada en los planes del entrenador.

90

Fotos de la afición de Osasuna en El Sadar ante el Girona Javier Bergasa / Oskar Montero / EFE

Hubo que esperar trece años para volver a ver un partido de UEFA por Pamplona. Javier Aguirre como entrenador propició que visitara El Sadar el Rennes. Fue solo un combate porque el equipo francés liquidó a Osasuna en esa eliminatoria previa en dos encuentros muy grises. Fue la vuelta por Europa menos intensa y que pasó casi inadvertida también para los aficionados –la eliminatoria se disputó en el mes de septiembre y el asunto quedó zanjado en las primeras semanas del campeonato–. Osasuna se había clasificado para la Copa de la UEFA por haber sido finalista de la Copa en el curso anterior –la primera final perdida contra el Betis– y el conjunto andaluz tener plaza continental. Los rojillos habían sido décimoquintos.

El gran curso de Osasuna en Europa ha sido el último en el que se metió, hace 16 años. La fantástica clasificación liguera de la mano de Aguirre en la campaña anterior –los rojillos fueron cuartos– permitió al equipo entrenado por Ziganda participar en la previa de la Liga de Campeones y, tras ser eliminados sin perder por el valor doble de los goles en la ronda preliminar contra el Hamburgo, llegar después hasta las semifinales de la Copa de la UEFA y caer en semifinales solo por la diferencia de un gol ante el Sevilla, a la postre el ganador del torneo.

El paulatino avance en la competición y superación de las rondas obsequió a los aficionados con encuentros y experiencias inolvidables, desde la peregrinación de aficionados a Burdeos, el gol en la prórroga de Nekounam en el minuto 120 que dio la clasificación frente a los galos, la goleada en Leverkusen o la ilusión del tanto de Roberto Soldado en la idea de las semifinales ante el Sevilla. Como para no querer volver. 

Los rivales y las cifras de Osasuna en Europa

Los rivales y las cifras de Osasuna en Europa