Tres operarios de la Carpintería Hermanos Aldaz han comenzado este viernes la instalación del vallado para el encierro de las fiestas de San Fermín en Pamplona.

Los primeros tablones han sido colocados en el callejón de acceso a la Plaza de Toros y progresivamente se irán montando en el resto del recorrido, desde los Corrales del Gas, cuesta de Santo Domingo, hasta la intersección entre las calles Estafeta y Amaya, que será la última parte.

Durante los días previos, el personal de Carpintería Hermanos Aldaz se ha encargado de revisar y ordenar los elementos de madera (900 postes, 2.700 tablones y 2.500 cuñas) que se irán instalando hasta el día 6 de julio.

Hay, además, unas 70 puertas de diversos tamaños que sirven tanto de evacuación del vallado como de cierre del recorrido. Aproximadamente un 2% de todo este material hay que renovarlo anualmente porque la madera se va deteriorando; los elementos nuevos son de silvestre autóctono con certificado PEFC.

Cada elemento del dispositivo es una pieza de una estructura de seguridad prefijada, ya que todos los años se encajan los mismos elementos en los mismos puntos, gracias a un código que combina números y letras que marcados con pintura en los elementos de madera.

Íñigo Aldaz, cuya empresa realiza la operación desde 1992, ha explicado que este sistema facilita las labores de colocación y evita molestias.

La instalación del doble vallado continuará a lo largo de todo el mes hasta que la quede cerrado definitivamente el día 6 de julio.

Durante los Sanfermines, cerca de 70 personas trabajarán a diario en el desmontaje de las tablas, una operación que comienza a cuando termina el encierro, sobre las 8.10 horas, y que se realiza a gran velocidad para restablecer lo antes posible el tráfico.

De forma complementaria esta semana empleados municipales están limpiando los cajetines de hormigón con tapa de metal que podrían denominarse pozos de anclaje (sirven de base a los postes verticales que conforman el vallado) y que están habitualmente cubiertos por una tapa de acero.

Además, el Servicio de Jardines inspecciona el arbolado situado en el entorno, tanto del encierro, como del recorrido del encierrillo, para realizar los ajustes en la vegetación que sean necesarios para el correcto desarrollo de ambos actos.

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El vallado del encierro de San Fermín, preparado para su colocación Javier Bergasa