La situación es crítica. El Banco de Alimentos de Navarra (BAN) ha activado una alerta solidaria ante el desplome de las donaciones en la última campaña: necesita urgentemente 100.000 euros para poder seguir alimentando a 25.000 personas. Con los fondos actuales, la entidad tendría que reducir nuevamente la cantidad de comida que reparte en tan solo dos meses. Ante esta delicada situación, la presidenta del BAN, Marisol Villar, y el secretario, Ramón Navarro, realizaron este martes un llamamiento a la solidaridad de empresas y particulares.
El contexto de incertidumbre y de alta inflación está afectando enormemente a la actividad de la Fundación Banco de Alimentos de Navarra, que vive este verano una de las situaciones “más delicadas” que se recuerdan en los últimos años. Al descenso de las donaciones directas también se ha unido la caída imparable en la entrega de alimentos por parte de las principales empresas y firmas.
La última campaña solidaria organizada por el BAN, La Gran Despensa 2022 (celebrada entre mayo y julio), solo ha logrado un tercio de las estimaciones inicialmente previstas: 135.684 euros entre donaciones directas y compra de bonos en supermercados, además de la recolecta de 124.805 kilos de alimentos de primera necesidad.
Baja la solidaridad tras el covid
Son datos que contrastan enormemente con los 741.000 euros que se recaudaron el año pasado y, especialmente, con los de la campaña de 2020, cuando se superó el millón de euros (1.172.000). Viendo las cifras, parece claro que ya queda poco de esa ola de solidaridad que se desató durante la pandemia.
En el momento actual, el Banco de Alimentos de Navarra dispone de un presupuesto de 190.000 euros. El gasto que realiza mensualmente la entidad para comprar las 300 toneladas de alimentos que reparte es de unos 100.000 euros. Así, el BAN tan solo dispone de fondos suficientes para garantizar su actividad durante dos meses más. Después, se vería obligado a reducir la cantidad y la calidad de los alimentos que reparte, como ya ha hecho en los últimos meses, pasando de los 14 a los 7 kilos por persona y eliminando productos básicos como el pollo o el pescado por su elevado precio.
“Estamos ante una alerta solidaria. Necesitamos urgentemente ingresos económicos, otros 100.000 euros por lo menos, para que volvamos a entregar a más de 25.000 personas usuarias una dieta alimentaria lo más completa posible”, aseguró la presidenta de la fundación, Marisol Villar.
“Es una alerta solidaria: necesitamos conseguir ingresos urgentemente para poder continuar”
Además, tanto Marisol Villar como Ramón Navarro animaron a la ciudadanía navarra a mantener las donaciones online, que se podrán hacer a lo largo de todo el año en la página web de la fundación: www.bancoalimentosnavarra.org, mediante transferencia bancaria, donación online o a través de Bizum: 00262.
“Pedimos a la población que apueste por las donaciones online, que suponen un ahorro total en transporte, gasolina y almacenamiento. Evitan los problemas de caducidad y permiten la compra de los alimentos necesarios en el momento oportuno, evitando así un desperdicio y una contaminación innecesarias. Aunque a ciertas personas les produzca reparo, lo cierto es que el mejor modo de ayudarnos es donando a través de nuestra página web. Así aprovechamos y exprimimos hasta el último céntimo”, concluyó Marisol Villar.
