Un total de 36 bomberos y una bombera se incorporarán en los próximos días a los Parques de Tudela, Altsasu / Alsasua, Peralta / Azkoein, Sangüesa / Zangoza, Lodosa y Auriz / Burguete, tras superar el curso de Ingreso Básico de la Escuela de Seguridad y Emergencias de Navarra (ESEN), cuya clausura ha tenido lugar esta mañana en Baluarte.

Se trata de la promoción que inició el curso el pasado mes de abril, tras superar las diferentes pruebas de las oposiciones. Desde entonces, han recibido formación en materias como la atención a la emergencia sanitaria, la prevención y extinción de incendios tanto en edificios como forestales, y el funcionamiento de la organización y coordinación del Servicio de Bomberos, entre otras.

El acto ha estado presidido por el vicepresidente y consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior, Javier Remírez, acompañado por la directora general de Función Pública, Amaia Goñi; la directora gerente del Instituto Navarro de Administración Pública (INAP), Eva Zarranz y el director de la ESEN, Jorge Mori; quienes han hecho entrega de los diplomas y cascos de seguridad al conjunto de la promoción, dándoles la enhorabuena. Asimismo, también han estado presentes la directora general de Interior, el director del Servicio de Protección Civil y Emergencias, y el director del Servicio de Bomberos.

El vicepresidente Remírez ha felicitado a los 37 efectivos, 36 hombre y una mujer, que salen de esta promoción tras recibir “una formación exhaustiva y completa en todo lo que tiene que ver con la gestión de la emergencia”. Según ha señalado, “un pilar clave que redunda en el objetivo de que los diferentes organismos sean capaces de prestar el mejor de los servicios públicos a la ciudadanía”.

Una cuestión en la que también ha incidido el director de la ESEN, Jorge Mori, quien ha destacado tanto el esfuerzo del alumnado como la calidad de la formación recibida. El director Mori ha señalado que se trata de un programa formativo actualizado año a año, “adaptado a las nuevas necesidades del Servicio, tanto en el nivel operativo como legislativo”.

Finalmente, también ha tomado la palabra el delegado del curso en representación de los nuevos bomberos y bombera, Marcos Gogorza, quien ha dado las gracias a sus profesores y a la escuela y se ha dirigido a sus compañeros y compañera, “con esfuerzo y perseverancia lo hemos conseguido. Ya somos bomberos”, ha dicho.

Apuesta por el refuerzo del Servicio y mayor presencia de mujeres

Asimismo, el consejero les ha trasladado el compromiso del Gobierno de Navarra con el Servicio de Bomberos de Navarra, y ha destacado las acciones desarrolladas desde el inicio de la legislatura para “contar con un Servicio bien dotado y estructurado, capaz de hacer frente a las diversas emergencias”. Entre ellas, el consejero ha citado la aprobación a lo largo de la legislatura de 135 nuevas plazas de bomberos, cuyas últimas convocatorias pendientes se llevarán a cabo el año que viene, y el continuo esfuerzo presupuestario “para 2023 el presupuesto asciende a 37 millones, un 37% más que en 2019”. Ha destacado que, actualmente, la plantilla cuenta con más de 470 efectivos, la mayor de los últimos 15 años.

Por otro lado, Remírez ha valorado positivamente la incorporación de una mujer al Servicio, algo que no tenía lugar desde el año 2004. Con ella, ya son tres las mujeres que actualmente forman parte del Servicio, “lo cual contribuye a desmontar los roles de género y a que más mujeres y niñas puedan tener referentes. Confío en que en próximas convocatorias se puedan incrementar el número de bomberas en la misma línea como, por cierto, se está produciendo en otros servicios de mayoría masculina como la Policía Foral”, ha expresado.

Más de 800 horas prácticas

A lo largo de estos meses, los bomberos y bomberas ha cursado un total de 1.254 horas lectivas, con un total de 813 horas prácticas y 441 horas de contenido teórico, repartidas a través de 10 módulos temáticos.

Así, han recibido formación en diferentes aspectos relacionados con la gestión de la emergencia, tales como evacuación y traslado de pacientes, apoyo psicológico en situaciones de emergencia, o planes de emergencia, entre otros.

Otras de las materias incluidas en el programa han sido las operaciones de búsqueda, salvamento y rescate en sus diferentes tipologías: acuático, en altura y espacios confinados, en accidentes de tráfico o técnicas de búsqueda y orientación. Así como la intervención en emergencias con materias peligrosas o estructuras colapsadas, la investigación de incendios o la organización, coordinación y procedimientos del Servicio de Bomberos.

Por último, otros de los módulos se han centrado sobre responsabilidades personales; recursos operativos, conocimientos y habilidades transversales e intervención operativa en fenómenos de diferentes tipologías.

La formación ha tenido lugar en la Escuela de Seguridad y Emergencias de Navarra, en las instalaciones del Servicio de Bomberos, y en otros centros para prácticas de Fuego Real en Seganosa (Pontevedra) y en el centro de Los Arcos.