Cuando este domingo salga al campo de Plenas, en Zaragoza, el corellano Ángel Pérez estará cumpliendo 47 años. Y lo celebrará disputando su quinta final del Campeonato de España de Caza Menor con Perro, después de haber ocupado la segunda posición en la semifinal celebrada el pasado día 20 de noviembre en La Puebla de Albortón, también en Zaragoza. Allí compartió prueba con los también navarros Luis Agramonte y Francisco Fonseca, campeón y subcampeón, respectivamente, del campeonato navarro de esta disciplina. Sin embargo, solo Pérez logró colarse entre los 12 primeros de la zona norte.

Cincuenta y cuatro participantes lo dieron todo para demostrar su habilidad y su pericia en el coto aragonés, en el que se estableció un cupo de tres perdices. Todos ellos abatieron 12 codornices, 4 zorros, 2 conejos y 34 perdices, la pieza estrella del torneo más importante del calendario anual de la Real Federación Española de Caza, para el que obtienen plaza los 12 primeros de cada una de las zonas de España (norte y sur). Pérez no había participado en el campeonato de Navarra, pero accedió a la semifinal por haberla ganado el año anterior. Y lo mismo le ocurrirá en el 2023, ya que el ganador y el segundo clasificado consiguen plaza automáticamente para la semifinal del año siguiente.

El cazador corellano atesora en su palmarés cuatro victorias en la prueba autonómica, pero decidió no tomar parte en la de este año, ya que, según aduce, prefiere cotos en los que no se emplee caza reforzada. No obstante, explica que sus compañeros y amigos le contaron que el emplazamiento escogido, Pina de Ebro (Zaragoza), resultó muy atractivo, por lo que no descarta inscribirse en la próxima edición, si se repite el lugar.

En cuanto a La Puebla de Albortón, donde se celebró la semifinal, se trata de un terreno que conoce casi al dedillo, aunque apunta que fue “un escenario completamente distinto”. “Este año, había menos densidad y era perdiz muy vieja, mucho más difícil de caza”, relata, antes de rememorar cómo, una semana antes, acudió al cazadero con Fonseca y Agramonte, para analizar in situ el terreno y darles consejos, sobre todo al campeón navarro, de 25 años y un recién llegado a la competición. “Me pareció un chaval majísimo y me sorprendió, porque era muy educado y tenía una gran actitud; se lo veía con muchas ganas de aprender”, cuenta.

Desafortunadamente, ninguno de los dos tuvo su día y no pudieron obtener un hueco en la final de este domingo. Pérez resalta que, debido a la poca densidad que había, iba a influir mucho la suerte. “Yo sabía que iba a estar muy controlado por todo el mundo –explica–, ya que participaban algunos muy buenos anteriores campeones de España. Así que yo planteé mi estrategia: ir rápido, esquivar a esos rivales y entrar en un cazadero lo más pronto posible”. Y así lo hizo. Cazó muy rápido y enseguida se colocó con dos perdices, poco después de haber abatido una codorniz. “Y, por fortuna, vi un zorro de lejos, apreté a correr, lo sorprendí y también lo logré cazar”, recuerda.

Lo de apretar a correr no es un eufemismo. El cazador corellano accedió al control una hora antes de su cierre, en torno a las 14 horas, después de haber recorrido 37 kilómetros y haber registrado un desnivel positivo de 1.100 metros. “Pensaba que, entre los 54 participantes, habría dos o tres que cazarían tres perdices. Pero, al final, solo lo consiguió uno, el que se quedó campeón. Cuando vi lo que yo había abatido, creí que, con eso, me valía para asegurarme la semifinal del 2023, así que no tardé en ir al control. Podría haber ido corriendo a por otra perdiz, pero eso hubiera sido forzar demasiado la máquina”, sostiene.

Al campo salió con su perro Kes, un drata de siete años y medio, que reemplazó a Canela, la perra con la que ganó la semifinal del 2021. A la final, acuden los dos animales, aunque ninguno tiene la plaza asegurada, según subraya Pérez: “Tengo la mala costumbre de, por la mañana, antes de comenzar la prueba, sacarlos a pasear y mirarlos fijamente. El que me transmite mejores sensaciones, ese es el que sale a competir”. Sin embargo, desliza que Kes tiene más opciones, ya que, por el tipo de cazadero de la final, se le puede dar mejor.

Precisamente, de cara a la final, confiesa que se siente muy ilusionado, sobre todo después de lo ocurrido en la del año pasado, cuando se le lesionó la perra y vio muy poca caza (de los 28 participantes, se quedó en el puesto número 16). “El pasado fin de semana, estuvimos viendo el terreno y creo que es un cazadero muy bonito. Ya sé que es el coto del actual campeón de España, que competirá muy duro por revalidar el título, pero el lugar no presenta mucha densidad de perdiz, por lo que, por el tipo de escenario y por cómo es la prueba, pienso que puedo disponer de oportunidades para hacer un buen papel”, subraya.

De hecho, afirma que se llevará la bandera de Navarra, por si, finalmente, puede subir a algún cajón del podio. “Me encuentro físicamente muy fuerte, me sigue respetando la salud, los perros me cazan muy bien y el cazadero es apropiado para mí. Por tanto, si me sale un día bueno y gracias a la fuerza que me dan mis hijos, Diego y Aitana, y mi pareja, Carmen, que son los que aguantan todas las horas que paso en el campo y quienes me acompañan a todos los campeonatos, espero poder firmar una buena actuación”, concluye.

Claves

l Clasificación de la semifinal del Campeonato de España.


Norte

1.- Jesús Cabrera (Aragón)2.000 pt.

2.- Ángel Pérez (Navarra)1.700

3.- Víctor Aldama (La Rioja)1.250


Sur

1.- Francisco Ruiz (Andalucía)1.100

2.- Samuel Melero (Extremadura)800

3.- Juan Miguel García (Murcia)550


l Cinco finales. Para Ángel Pérez, la de hoy será su quinta final del Campeonato de España de Caza Menor con Perro. En las anteriores, ha logrado ser, por orden cronológico, 13º, 6º, 5º y 16º.