El Departamento de Educación presentó a finales de 2020 el protocolo de detección del alumnado de altas capacidades. Una buena noticia que, sin embargo, tiene una pega y es que los centros educativos no están obligados a realizarlo. Desde la Asociación Navarra para las Altas Capacidades (ANAC) reivindican la importancia de que Navarra exija a los colegios llevar a cabo estas pruebas para identificar de forma temprana al mayor número de escolares. Al alumnado detectado se le aplica un protocolo de intervención educativa para el que, a juicio de la presidenta de ANAC, María Sola, “se necesitan recursos y formación del profesorado”.
Navarra es una de las CCAA que cuenta con protocolos de identificación e intervención de las altas capacidades. Algo que no es baladí ya que muchas otras ni los tienen. “Se hizo un esfuerzo grande por elaborar estos protocolos, que tardaron en salir porque estaban en revisión continua”, explica Sola. Pero existe un inconveniente y es que no son obligatorios. “Es decisión de la dirección del centro educativo si se pasan o no las pruebas. Un colegio puede decidir realizar las pruebas diagnósticas o no hacerlo y esperar a que surja algún problema, y aplicar entonces el protocolo de intervención”, prosigue la presidenta de ANAC que insta al Gobierno de Navarra “a establecer su obligatoriedad como ocurre en la CAV, Asturias y creo que Cantabria”.
El protocolo de detección está orientado a identificar a los menores con altas capacidades. “Se pasa una prueba diagnóstica grupal en 3º de Infantil o 1º de Primaria y ahí salen menores que están por arriba y otros que están por abajo. A los primeros se les hace una prueba individualizada”, explica Sola.
Una vez que están identificados se aplica un protocolo de intervención educativa que varía en función de la capacidad del alumnado y la preparación del profesorado. “Son actuaciones enriquecimiento curricular, el agrupamiento homogéneo o heterogéneo, la flexibilización, la aceleración total o parcial...”, expone Sola, que cree que “el quid de la cuestión es la intervención. Si a cada uno se le diera lo que necesita, con independencia de que tenga o no altas capacidades... pero faltan recursos y mucha formación”.
