El departamento de Salud destinó el año pasado un total de 47,6 millones de euros a derivaciones a hospitales privados, un 4% con respecto a 2021, año en el que se el gasto fue de 45,9 millones. Según se detalla en la Memoria de 2022 de Osasunbidea –presentada el martes en el Consejo Navarro de Salud– el gasto en conciertos con centros hospitalarios de Navarra fue de 1,7 millones más que el año anterior.

Por centros, el mayor concierto fue con el Hospital San Juan de Dios –25,3 millones, un 7,6% más que en 2021–; seguido de la Clínica Universidad de Navarra (CUN), con 18,53 millones (un 6,2% menos); Centro Diagnóstico Granada, 1,8 millones (5,6% más); centro Josefina Arregui, 1,7 millones (7% más); y el Centro Médico Asistencial La Ribera, con 178.402 euros (un 2,5% más de gasto que en 2021).

La mayoría de las derivaciones a estos centros son pacientes que requieren de atención en estos hospitales, pero también hay derivaciones para la realización de pruebas diagnósticas. De hecho, las exploraciones diagnósticas suponen un volumen muy importante de la actividad hospitalaria, por lo que muchas veces requiere de trasvase a lo privado para aligerar las listas de espera.

En lo que respecta al ámbito público, la Memoria recoge que en 2022 se realizaron más de 15.000 colonoscopias –de las cuales 4.371 han sido de cribado de cáncer de colon–, casi 13.000 ecocardiogramas y más de 180.000 exploraciones radiológicas de especial seguimiento (ecografías, mamografías, Resonancias y TAC). En conjunto, en lo que son exploraciones complementarias distintas, se ha pasado de 200.309 a 210.381: un 5% más.