El director genera de Salud de la Comunidad Foral, Carlos Artundo, ha mostrado su confianza en que Navarra pueda alcanzar la inmunidad de grupo en otoño y ha incidido en que, con las nuevas variantes, esto pasa por lograr la inmunización de entre el 85% y el 90% de la población.

En declaraciones a los periodistas durante una rueda de prensa, Artundo ha subrayado que "con un 70 % de la población inmunizada no es suficiente para conseguir esa inmunidad comunitaria" pues "hoy ya todos los autores de prestigio están hablando de que con la agresividad de esta variante tenemos que llegar a niveles de cobertura vacunal del 85 % - 90 %".

El director general de Salud ha considerado que Navarra podría llegar a estas tasas a lo largo del otoño "si se mantiene el patrón de suministro", pero aún no cuentan con ninguna confirmación al respecto más allá del mes de agosto.

Aunque en los últimos días se ha experimentado en Navarra una ligera reducción de los casos, Artundo ha advertido que "todavía estamos en incidencias acumuladas de las más altas del conjunto del Estado e incluso de Europa" y hay un "importante impacto asistencial tanto en Atención Primaria como en la red de hospitales".

En un futuro próximo, ha señalado, el objetivo es consolidar esta tendencia descendente y después verificarla, pues "podría ser una situación de evolución en dientes de sierra como hemos visto el verano pasado".

Aunque ha reconocido que "hay personas vacunadas que están ingresando", ha asegurado que "la diferencia entre vacunados y no vacunados es abismal" y que "las vacunas que tenemos en estos momentos son tremendamente eficaces en cuanto a proteger a la gente de la infección, la hospitalización, la hospitalización grave y la muerte".

Una muestra de esto, ha comentado, se puede ver en las residencias de ancianos en las que se han notificado contagios, pues aunque se han infectado personas con la vacunación completa, los contagios han sido muchos menos que en la fase previa a la vacunación y "los cuadros en general son mucho más leves".

Estos días, ha comentado, están "intentando repescar" a las personas que se han quedado sin vacunar a través de llamadas telefónicas, un grupo en el que hay personas que no quieren inyectarse pero también que no han podido ser localizados, se encontraban de vacaciones o no podían solicitar la cita por algún otro motivo.