pamplona - El Gobierno de Navarra aprobó ayer el proyecto de Ley foral de Modificación y Actualización del Fuero Nuevo, el código civil navarro que fue promulgado en 1973 por Franco y que llevaba prácticamente sin tocar desde entonces. Tras casi tres años de trabajos en los que han tomado parte expertos juristas de todas las corrientes y representantes de los partidos con presencia en el Parlamento -a través de una ponencia que se creó en abril de 2016-, Navarra ya cuenta con todo el derecho civil privado (personas, familia, sucesiones, propiedad y contratos) reformado y compilado en 596 leyes y 5 libros, que rigen desde uniones matrimoniales hasta herencias y testamentos, pasando por contratos entre particulares y otros actos, y que tras 45 años sin cambios ya se encuentran actualizados a la realidad de la Navarra del siglo XXI.

Esta falta de actualización, arrastrada hasta ahora, en la práctica había convertido el Fuero Nuevo en un texto inservible arrinconado por el derecho civil estatal, más acorde a los nuevos tiempos. Ahora, el trabajo conjunto de legisladores, técnicos, expertos y Gobierno de Navarra se ha centrado en aprovechar la competencia en exclusiva que se tiene en esta materia por derecho histórico para hacer del Fuero Nuevo una herramienta útil, moderna. Eso quiere decir que reconoce a todo tipo de uniones matrimoniales y hechos familiares, elimina todas las figuras que hacían prevalecer al hombre sobre la mujer (el texto de 1973 está concebido desde la óptica patriarcal del franquismo), da seguridad a las parejas estables y a los divorcios y refuerza la protección de las personas en vulnerabilidad. “Es una ley muy necesaria, una de las más importantes de la legislatura”, apuntó ayer la consejera María José Beaumont, titular de Presidencia.

Será ella quien defienda en el Parlamento (adonde va ahora el proyecto de ley, que se tramitará por procedimiento de urgencia y se aprobará definitivamente antes de que acabe la legislatura) la reforma, como presidenta del Consejo Asesor de Derecho Civil Foral (integrado por 20 juristas) que ha recogido las propuestas de la ponencia parlamentaria y ha redactado los textos -con la ayuda de la especialista Ana Clara Villanueva Latorre- después de que UPN crease el órgano en 2006 y lo desmantelase en 2010, sin resultados concluyentes.

tres pilares Porque el Fuero Nuevo regula actividades cotidianas -“¿quién no ha tenido en su casa, en su familia o en su círculo de amigos dudas sobre testamentos o contratos?”, preguntó Beaumont a los periodistas-, el cambio consideró que era importante acometer una reforma que se ha guiado por tres premisas: la protección de la persona en su individualidad, sobre todo cuando se es más vulnerable (infancia, dependencia, vulnerabilidad...); la protección de la familia con independencia del origen, matrimonial o no, y el reconocimiento expreso de relaciones derivadas de la monoparentalidad, la reconstitución familiar y también las comunidades de ayuda mutua; y el respeto a la plena libertad de disposición mediante la supresión de instituciones discriminatorias con la mujer y el respeto a la libertad de testar.

Con todo eso, además de las reformas técnicas acometidas en casi todas las 596 leyes del Fuero Nuevo, el Gobierno confía en que el Parlamento apruebe “por unanimidad” el proyecto, en cuyas negociaciones el actor más reacio ha sido UPN. El partido regionalista no ha tenido fácil oponerse frontalmente a la reforma, porque el texto estaba desfasadísimo y contenía instituciones inasumibles hoy. Pero en las últimas semanas han proliferado las voces reacias a que sea este Gobierno el que haya reformado el texto. UPN, en su defensa folclórica del Fuero, siempre ha sentido que el código civil es de su propiedad. Y que es mejor que sea un adorno a que el cambio lo haga útil transformándolo en una herramienta progresista, más valiente en lo social de lo que a UPN le gustaría.

El código civil navarro. Regula

las uniones conyugales, los testamentos, las herencias y otros

tipos de contratos privados. Sin

modificar desde 1973.

¿Qué se ha hecho? Actualizarlo. Ahora se reconocen todos los tipos de uniones matrimoniales; familias y crisis; se dota de igualdad a todos los hijos; y se mantiene la libertad para testar.

¿Cómo afectará? Está previsto

que entre en vigor seis meses

después de su aprobación por el

Parlamento (prevista para antes

de abril), tiempo necesario para

que registros, notarías y juzgados

de lo civil se hagan cargo de la

nueva situación. El Gobierno tendrá que llevar a cabo una labor

de divulgación para que se

conozcan todas las medidas.

La pareja estable. Para empezar, la reforma del Fuero Nuevo supera el matrimonio por la Iglesia como única unión posible y establece que las personas se unan en una figura que se denomina pareja estable. Dos personas, mayores de edad, emancipadas y que vivan juntas una situación análoga a la matrimonial podrán constituirse como pareja estable y decidir sobre su régimen. A partir de unos mínimos, el Fuero Nuevo otorga libertad para determinar qué régimen se quiere. El Gobierno foral implementará un registro único en el que las parejas tendrán que inscribirse, aunque esto es algo que todavía tiene que debatirse.

El divorcio, desarrollado. La figura del divorcio -introducida a regañadientes en 1987- se reescribe desde un prisma moderno y útil: se introduce la figura de la crisis familiar y se regulan la guardia y custodia, las estancias y contactos con otros familiares, los deberes de alimentación, habitación, educación y asistencia material y emocional, la atribución de la vivienda y los gastos ordinarios. Se fomenta el pacto de parentalidad como primera opción y se introduce la figura del coordinador parental para mediar y reducir la litigiosidad.

Libertad para testar y defensa de las personas vulnerables. Una de las figuras más genuinas del Fuero Nuevo es la libertad para testar. Se eliminan todas las figuras anacrónicas relativas a los impedimentos para heredar de hijos fuera del matrimonio u otras nupcias y se modifica el testamento de hermandad de tal manera que no sea imposible revocar el contrato en el caso de que una de las partes devenga incapaz. Se mantiene la figura de la legítima navarra como fórmula a la hora de poder fijar herencias para cada descendiente, pero no en los términos literales por los que se les dejaba cinco sueldos febles y una robada de comunal. Esto, por extravagante que parezca, había genera do más de un problema en ayuntamientos.

Anular contratos. Para evitar los abusos de influencia, se habilita la posibilidad de anular contratos que suscriban personas en vulnerabilidad (por ejemplo, dependientes) por parte de los herederos.

Equiparación de hermanos. Se ha modificado el orden de suceder y se ha equiparado a los hermanos con independencia de su vínculo doble o sencillo. También se suprime el testamento ante párroco, otra figura desfasada.

Cambios en la dación en pago. En materia de obligaciones se ha mejorado la redacción en materia de dación en pago, cesión de créditos y derecho de retracto. Se establece la dación en pago, la dación para pago y dación en pago necesaria, la que puede aceptar el juez en caso de iliquidez del deudor.

algunos de los cambios en la reforma del fuero nuevo