pamplona - El consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior, Javier Remírez, expresó ayer el “máximo respeto” del Ejecutivo foral hacia las víctimas del terrorismo, su intención de “colaborar” con las distintas asociaciones y su rechazo a la “instrumentalización de la memoria”. Así lo señaló Remírez, preguntado por los reproches que los representantes del Ejecutivo, con la presidenta del Gobierno María Chivite a la cabeza, recibieron hace días en Berriozar en el acto en memoria de Francisco Casanova, asesinado por ETA, homenaje organizado por el colectivo “Vecinos de paz”.

“Tanto la presidenta del Gobierno como en mi caso particular hemos acudido muchísimos años a este acto en calidad de ciudadanos, de responsables políticos y en este caso del Gobierno”. “Nuestro respeto hacia las víctimas del terrorismo es máximo y nuestra colaboración con las distintas asociaciones de víctimas del terrorismo va a continuar, especialmente a través de la dirección general de Paz y Convivencia”.

Adelantó Remírez que el Gobierno de Navarra “no va a tener ninguna actitud de reproche ni de instrumentalización de la memoria porque es un valor y un bien colectivo” y por ello hizo un llamamiento “a la reflexión”, para que las actitudes en actos de recuerdo a una víctima de ETA “contribuyan realmente a la convivencia y a preservar ese bien colectivo que es la memoria de las víctimas”. Y alineó a la presidenta Chivite en esas mismas ideas. “Cualquier tipo de incidente no va a hacerle cambiar su posicionamiento de respeto máximo y amparo a las víctimas del terrorismo. Su compromiso cívico como persona y ahora como presidenta es fundamental”, apuntó el consejero, que extendió “al conjunto del gobierno” este posicionamiento, afirmando la “disponibilidad” de la presidenta “abierta a todo tipo de colectivos para tener unas relaciones adecuadas y para que la memoria de las víctimas del terrorismo sea un bien colectivo a preservar”. - D.N