pamplona - La Mesa y la Junta de Portavoces del Parlamento foral aceptó ayer la petición de Navarra Suma para que el consejero de Educación, Carlos Gimeno, acuda a la Cámara para explicar el nombramiento de su cuñada como miembro de su gabinete. Una decisión muy criticada por la derecha y sobre la que los partidos que apoyan al Gobierno consideran que es potestad del consejero nombrar a quien considere para un cargo de confianza, si bien algunos dicen que ellos no lo hubieran hecho.

Más allá de la lógica defensa de su compañero Ramón Alzorriz (PSN), por Podemos Mikel Buil afirmó que en el caso de haberse producido en el seno de la formación morada “probablemente” hubiera sido cuestionada y analizada “en base a nuestro código ético”. Marisa de Simón (I-E) fue menos contundente al advertir de que el cuestionado es “un puesto político y de confianza, de los poquitos que hay de libre designación”, aunque a pesar de no criticarlo, “otra cosa es lo que hubiéramos hecho” si hubiese sido un consejero de su formación. - D.N.