- El PNV quiere que dure esta especie de luna de miel en la que ha entrado la relación con la oposición, todo ello propiciado por la crisis sanitaria del coronavirus, que invita a unir fuerzas porque la ciudadanía vasca va a penalizar cualquier declaración altisonante. Después de que el lehendakari pactara con la oposición el aplazamiento de las elecciones del 5 de abril por esta emergencia sanitaria, Andoni Ortuzar cruzó ayer los dedos para que todos los partidos sigan “en el mismo bando”.

Estas declaraciones llegan en un momento en que se abre el horizonte de varias semanas de interinidad del Gobierno Vasco hasta que se convoquen las elecciones. Es cierto que se encuentra en plenitud de funciones hasta el mismo día en que se vayan a celebrar los comicios, pero EH Bildu y Podemos entienden que tiene que haber un control parlamentario con reuniones periódicas de la Diputación Permanente, que no tiene las mismas competencias que el Parlamento ya disuelto. El PNV ha tenido estos días algún rifirrafe con EH Bildu, que ha sido con diferencia el partido que más ha presionado con la gestión del coronavirus y el aplazamiento de los comicios, si bien ayer Ortuzar apostó por mantener abiertos los cauces de comunicación como la mesa de partidos del lunes pasado, o la propia Diputación Permanente.

En una entrevista en Radio Euskadi, el presidente del PNV opinó que ahora “no hay gobierno y oposición” porque la riña política sería desoladora para los vascos. Él mismo evitó la controversia. Sobre la reunión del lunes entre el lehendakari y la oposición, que sirvió para aplazar las elecciones, dijo que fue una “gozada” de encuentro porque “no hubo nadie que elevara la voz ni nadie que ni siquiera dejara entrever intereses partidistas”.

El jeltzale apostó por que las elecciones se celebren “con todas las garantías, cuanto antes”. “Porque lo que nos viene detrás de esta pandemia sanitaria va a ser una tarea gigantesca que exige un gobierno fuerte y un parlamento fuerte”, dijo, en referencia al empleo que se va a destruir. No obstante, no quiso forzar porque la prioridad son los criterios sanitarios y el fin del coronavirus. “Si hay que ir a octubre porque la situación sanitaria lo recomienda, pues tendrá que ser en octubre”, aclaró.

Elkarrekin Podemos, por su parte, reclamó que la Diputación Permanente se reúna de forma periódica para garantizar el control parlamentario. A través de un comunicado, vio “imprescindible” adoptar medidas para garantizar la supervisión del Gobierno.

Estas declaraciones coinciden con el pronunciamiento de la Junta Electoral vasca, que dice compartir el acuerdo alcanzado entre los partidos para aplazar las elecciones y que considera “proporcionado y conforme a derecho” el decreto que firmó el Gobierno Vasco.

Este órgano, encabezado por el presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, Juan Luis Ibarra, es el encargado de velar por el correcto desarrollo de la campaña electoral, el derecho a voto y el derecho de los candidatos a presentarse. Su aval es importante, y ahora llega tras unas jornadas de enredo y confusión porque la Junta creía que no tiene competencia para dejar sin efecto las elecciones, y ninguna ley prevé lo que debe hacerse en una situación nueva y de excepcionalidad como la actual.

“Nos viene una tarea gigantesca que exige un gobierno fuerte y un parlamento fuerte”

Presidente del EBB del PNV

“Pedimos que la Diputación Permanente se reúna con cierta periodicidad”

Portavoz de Elkarrekin Podemos