La consejera de Economía y Hacienda, Elma Sáiz, ha admitido este jueves en el pleno del Parlamento de Navarra que las previsiones económicas "empeoran día a día" como consecuencia de la crisis provocada por el coronavirus.

"Como era esperado la cifras son malas", la pandemia "es un puñetazo en toda regla a nuestra economía ha dicho en respuesta a una pregunta del PSN sobre las previsiones económicas, y ha precisado que en el primer trimestre del año, con solo medio mes de COVID-19, la caída del PIB es ya del 2,8%.

Son datos, ha reconocido, "horribles y horrorosos" pero "reales", y ha advertido de que "las previsiones empeoran día adía por la incertidumbre de la situación".

Sin embargo ha puesto en valor que el Gobierno "ya lleva semanas dando pasos decisivos, abordando desde el primer minuto todas la necesidades, con todos los recursos y medidas", entre las que ha citado las ayudas a autonómicos, los plazos fiscales aplazaos o las líneas de avales y préstamos.

Son para Sáiz "medidas ambiciosas que van más allá" de las adoptadas en otros territorios y todo en el marco de unos presupuestos recién aprobados, que ya llevan una carga social de más del 54% porque esa es "la prioridad de este Gobierno", y son flexibles para adaptarse a las necesidades.

En este sentido ha recordado que para hacer frente al COVID-19 la Comunidad Foral ha partido con 140 millones de remanente se tesorería y preveía un déficit del 0% que ahora da margen, a lo que se puede sumar una relajación de las reglas fiscales y la emisión de deuda, una "fortaleza" en la que ya se está trabajando.

De esta ha dicho que de momento se trabaja con hasta 900 millones de euros de deuda a coro plazo y más de 300 a largo, y se está emitiendo, 75 en bonos sostenibles y 150 en préstamos.

"La hoja de ruta para el futuro es el plan de reactivación que fijará las prioridades aunque tendrá consecuencias presupuestarias, pero vamos a salir todos juntos, no nos dejemos guiar por la ansiedad sino por la efectividad de las medidas", ha pedido.

Un mensaje que ha reiterado también el socialista Ramón Alzórriz, para quien pese a las incertidumbres económicas provocadas por el coronavirus, con mayores gastos y menores ingresos, "se puede mirar al futuro con un prisma de esperanza" porque la situación de Navarra es "solvente" y el autogobierno permite atender a los más vulnerables.

"Que nadie se queda atrás, no queremos que se repita la receta de crisis anteriores ni acentuar la austeridad, sino estimular la economía para reforzar el estado de bienestar", ha señalado el portavoz del PSN, y aseverado que "lo primero son las personas, porque los recortes de los derechos no tienen cabida en esta crisis".