El Parlamento de Navarra ha vuelto a aprobar una iniciativa para reprochar al Gobierno la operación de sobrepago de Audenasa, a la que se pagaron cinco millones más de lo que pedía la Intervención General en concepto de las compensaciones que reciben los usuarios habituales de la AP-15.

La polémica nace de que la Intervención, debido a la enorme caída del tráfico en 2020 provocada por las restricciones de movilidad derivadas del coronavirus, abogaba por pagar una cantidad mucho menor, ajustada al menor número de bonificaciones concedidas. Pero, finalmente, el Gobierno, que participa al 50% en Audenasa, optó por apoyarse en otros informes que avalaban el pago de 6,2 millones, y no de 1,2 millones.

Navarra Suma, EH Bildu e I-E, los grupos de oposición, han sacado adelante una iniciativa que simplemente ha servido para volver a llevar al hemiciclo el debate sobre la operación. Para nada más, porque el enunciado de la moción, relativo a la petición de un informe a Comptos, no tiene sentido toda vez que el órgano fiscalizador ya contempla realizar un estudio sobre la operación.

Es decir, que la iniciativa de hoy no ha servido para aprobar ninguna petición de informe (ya solicitado por I-E y EH Bildu en su día, calendarizado y en el que ya trabaja Comptos), sino para volver a debatir sobre el tema. Razón por la que los grupos que apoyan al Gobierno han querido darle una relevancia menor al debate, que incluso el PSN ha visto como un intento forzado por parte de la oposición para atacar al Gobierno.

Los argumentos ya se conocen. Adolfo Araiz, parlamentario soberanista proponente, ha vuelto a remarcar que la operación no tiene un asidero jurídico ni una lógica. Eso movió a su grupo a pedir la declaración de nulidad, aprobada por el Parlamento pero ignorada por el Ejecutivo. Araiz ha remarcado que Audenasa no es ninguna sociedad necesitada de ayudas ni rescates (de cada 100 euros, 42 los reparte en dividendos) y ha reprochado a la consejera de Hacienda, Elma Saiz, que el Gobierno haya actuado más “como socio de Audenasa que como defensor del interés público”.

Por parte de Navarra Suma, Juan Luis Sánchez de Muniáin ha insinuado que la operación es “turbia”, y ha aprovechado para enlazar con otros aspectos de oposición con los que atacar el “desgobierno en el Palacio de Navarra”. Ha señalado que Saiz “se ha quedado sola” y ha remarcado que la cuantía del sobrepago, cinco millones, hacen del episodio un tema “de interés general”.

Desde I-E, partido que también ha apoyado la iniciativa, Marisa de Simón ha dicho que la operación es suficientemente sustanciosa como para volver a llevarla a debate. Además, ha apuntado que la petición del informe a Comptos era algo necesario.

Los grupos del Gobierno han querido pasar por encima. Consideran que es un tema suficientemente debatido y cuya investigación a cargo de Comptos ya está en marcha. “Esta solicitud, ojo, no el fondo del debate, es un paripé. Porque Comptos ya tiene calendarizado para este año el informe sobre Audenasa”, ha subrayado Ramón Alzórriz, del PSN, que ha reprochado a Navarra Suma la ligereza con la que hace acusaciones. “Muniáin dice que aquí hay algo turbio, y si Comptos llega y dice que todo ha estado bien, no le pasará nada”, ha lamentado.

Desde Geroa Bai, Uxue Barkos ha intervenido desde el escaño. “El asunto ya está decidido en el fondo y la petición está resuelto, porque todos los grupos apoyamos el informe de Comptos”, ha precisado.

Lo mismo desde Podemos. Ainhoa Aznárez ha mantenido el perfil bajo del resto de socios y se ha remitido al informe en el que ya se trabaja.