Primero Fraga, años más tarde Rajoy, y ahora, Núñez Feijóo. La historia del Partido Popular tiene una marcada huella gallega. Para la periodista Ana Pardo de Vera este tronco se erige desde las raíces de un PP “financiado en sus inicios por el tráfico de tabaco y drogas. El libro Fariña es una enciclopedia para eso”. “El PP nació en Galicia y fue financiado ilegalmente y con dinero del narcotráfico en Galicia”, denuncia Pardo de Vera. Un dinero que también sirvió, afirma, para “fundar el partido en Madrid”.

Consejero tras una crisis

Feijóo se perfila como el tercer gallego en presidir el PP. Sale muy bregado de Galicia, donde irrumpió como consejero en un momento muy delicado. “Cuando la tragedia del Prestige, subraya Pardo de Vera, Xosé Cuiña era el delfín de Fraga, llamado a ser su heredero. “Desde Génova”, destaca esta periodista, “se filtró que un familiar de Cuiña se había lucrado con un contrato de emergencia para equipamiento para limpiar el chapapote. Con Aznar de presidente y Rajoy de ministro, se “presionó” para que se echase a Cuiña de la Xunta, lo que sucedió en enero de 2003. Cuiña fue sustituido por Feijóo. Según María Obelleiro, Génova colocó a un Feijóo “alineado con las posiciones más extremas del partido” y al servicio de la dirección central. La historia vuelve a sonreír a Feijóo, aunque en este caso haya sido Génova la perjudicada.

Cabeza de cartel del PP

En 2006, Feijóo acabó liderando y unificando al PP en otro episodio que conecta con el que puede ser su reto en el futuro inmediato. El periodista David Lombao recuerda que Feijóo sustituyó a Fraga, en un proceso “muy tormentoso” y en un Congreso extraordinario al que llegó como candidato único “por aclamación”. Con el Partido Popular en la oposición y “muy roto”, añade Jesús González Mateos, Los paralelismos con la actualidad son evidentes.

Su sucesión

Feijóo pacificó en su día el PP gallego y desde entonces ha obtenido cuatro mayorías absolutas. En las últimas elecciones, de julio de 2020, ganó incluso un escaño, hasta 42, si bien perdió 54.388 votos con respecto a los anteriores comicios. Vox no obtuvo representación. La periodista María Obelleiro cree el target de este partido lo asume el Partido Popular con sus políticas,

Cuestión decisiva recuerda González Mateos, será “cómo quedará ahora Galicia. Parece “muy difícil que Feijóo pueda compaginar ser líder del principal partido de la oposición con seguir presidiendo la Xunta. Así que le toca decidir cómo pilotar su propio relevo, “porque su sucesión es muy difícil, no hay candidatos claros, puede abrirse una guerra interna por la sucesión, y mientras hay que gestionar”. Esa dificultad de encajar las piezas, considera González Mateos, lo “va a aprovechar” el BNG, formación reforzada en los últimos comicios gallegos en 2020.