pamplona - Un vecino de Pamplona de 54 años y de origen ecuatoriano ha sido condenado a dos años de prisión en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Navarra por abuso sexual después de haberle efectuado tocamientos a una menor de 14 años de edad cuando esta iba a sentarse en una marquesina del transporte urbano comarcal de Pamplona. El acusado, que no tiene antecedentes penales, aceptó la pena impuesta, además de una orden de alejamiento y de prohibición de comunicación con la menor que se prolongará durante seis años, y tendrá que pagar una indemnización de 1.500 euros. Asimismo se le condena a una multa de 240 euros por un delito leve de amenazas.
Los hechos ocurrieron sobre las 16.40 horas del 3 de febrero de 2018 cuando la menor caminaba junto a una amiga y otro amigo, de 15 y 16 años respectivamente, hasta la parada de la villavesa de Pamplona para coger el autobús en dirección a su casa. Al llegar a la marquesina de la parada, la menor se fue a sentar en el banco cuando el acusado, “actuando con ánimo libidinoso y sin consentimiento de la menor, aprovechó el momento para darle varias palmadas en los glúteos con ambas manos”.
La víctima reaccionó asustada, dio un grito y se apartó rápidamente del procesado. Al escuchar el grito de su compañera, la otra menor preguntó a la víctima qué había pasado, según recoge la sentencia, y esta declaró que le habían tocado el culo. Al ser preguntada por quién había sido, la menor le señaló al acusado que estaba sentado en el banco de la marquesina. La otra chica se dirigió entonces al encausado y le dijo “tocar culos no”, mientras que con la mano le hacía el gesto de negación. Ante esa reacción, el acusado se levantó de su sitio y dirigiéndose a esa otra menor le manifestó en tono amenazante “tú eres idiota”, mientras hacía el gesto de quitarse la chaqueta apartándose los menores de la parada de autobús, llamando la chica a la Policía. Personados en el lugar los agentes de la Policía Municipal de Pamplona, identificaron al acusado y procedieron a su detención.
La Audiencia considera desproporcionada la sustitución de la pena de prisión por la expulsión del país durante seis años que era lo que pedía la Fiscalía. El acusado lleva en Pamplona desde 2005 y ha trabajado ininterrumpidamente hasta 2018 y ahora busca empleo, razona la Sala para que no prospere la expulsión. - E.C.
