PAMPLONA. Agentes de la Policía Foral han imputado a un joven de 23 años que fue interceptado cuando conducía por el término de Villatuerta a 220 kilómetros por hora.

Según la información facilitada este sábado por el cuerpo autonómico, el suceso ocurrió este viernes por la mañana en la A-12 y en las pruebas que se le realizaron al conductor dio negativo tanto en alcohol como en drogas.

El joven, vecino de una localidad de la merindad de Pamplona, está acusado de un delito contra la seguridad vial.