- Las medidas que se han tomado desde el inicio de la pandemia en el ámbito de las residencias de personas mayores y de personas con discapacidad "empiezan a mostrar sus resultados estables y, con cautela, cabe señalar que se empieza a poner freno al contagio en los centros", afirmó ayer la consejera de Derechos Sociales, Carmen Maeztu.

En su comparecencia de prensa, junto a la directora gerente de la Agencia Navarra para la Autonomía y Desarrollo de las personas (Andap), Inés Francés, informó de los datos que arroja esta pandemia en un sector cuya vertiente muy negativa se encuentra en las 512 personas mayores que han fallecido, 363 de ellas con el coronavirus como causa directa -182 con virus confirmado y 181 con síntomas- y otras 149 en cuyas muertes, de manera indirecta, ha influido el coronavirus. En las residencias de personas con discapacidad han fallecido 10 personas -nueve de ellas con virus confirmado-.

Los datos ofrecen como aspecto positivo que 81 personas usuarias de estos centros han logrado superar la enfermedad; datos también que animan a vislumbrar la reducción de contagios aunque "hay que tomarlos con prudencia y no bajar la guardia", dijo Maeztu tras destacar que en apenas una semana se han triplicado las altas epidemiológicas, pasando de 27 a las 81 altas registradas hasta ayer miércoles, y el hecho de que desde hace cuatro días se mantenga estable el número de positivos. Añadió que prácticamente han desaparecido los casos con síntomas sin confirmación, lo que también indica que se están frenando los contagios en estos centros. Maeztu destacó que también han aumentado ligeramente el número de centros sin casos, que alcanzan ya el 55% en las residencias de mayores y el 77,6% en las de personas con discapacidad, y que continúan haciéndose pruebas diagnósticas.

La consejera y la gerente de Anadp relataron la incidencia de la pandemia en este sector sociosanitario. Así, el número total de casos confirmados en las residencias de mayores es de 846, permaneciendo en las propias residencias 791 personas y hospitalizadas, 55, mientras que la cifra de personas que presentan síntomas compatibles con COVID-19 se ha reducido a 18. Las personas trabajadoras de baja, en este momento, ascienden a 489. En el caso de los centros para personas con discapacidad, han fallecido nueve personas por COVID-19 confirmado, sobre un total de 10 fallecimientos. En estos centros hay 82 casos confirmados, de los que 77 permanecen en los centros y cinco hospitalizados. Con síntomas compatibles son seis. Y el personal de baja es de 82 personas. Añadió que "prácticamente han desaparecido los casos con síntomas sin confirmación", actualmente 18 casos, y destacó que los centros sin casos alcanza ya el 55% en los de mayores y el 77,6% en los de discapacidad. Detalló que en las residencias de mayores se han hecho 2.150 PCR y 2.087 test rápidos.

Maeztu agradeció a los profesionales del sector "su esfuerzo y dedicación" y aseguró que están actuando "con profesionalidad y la humanidad que les caracteriza". Apuntó que los profesionales están, además, intentando llenar el vacío que no pueden afrontar las familias por las medidas de confinamiento. Reiteró que "la sociedad puede estar tranquila" y valoró la "excelente atención" a las personas mayores y con discapacidad.

La consejera manifestó que desde el minuto uno han seguido las pautas dictadas por el Ministerio de Sanidad y atribuyó a las mismas el cambio de tendencia más positiva que se está dando en la actualidad en estos centros. Quiso dejar claro que el Gobierno de Navarra ha puesto "todos los medios a su alcance, sin escatimar, para luchar contra el COVID-19 consciente de que se trata de la población más vulnerable y con mayores tasas de mortalidad por coronavirus".

"Lamentablemente no todo está en nuestras manos -indicó-. "Especialmente las personas de más edad, con patologías previas o en situación de dependencia y residiendo en espacios amplios compartidos, es donde más incidencia y mortalidad está teniendo el virus. Creemos que la suma de estos tres factores explica en gran medida la evolución de la pandemia en el espacio residencial".

Destacó las medidas adoptadas como el equipo de monitorización y apoyo a los 71 centros de mayores y 49 de discapacidad, conformado por 13 personas; y la habilitación de cuatro recursos intermedios, a los que se ha derivado a 180 personas y que "ha permitido a los centros gestionar mejor sus espacios y cumplir los protocolos sanitarios". Además, Derechos Sociales ha intervenido en 14 de los 120 centros, 12 residencias de mayores y dos de discapacidad, intervenciones que, precisó, "no significan sustituir las direcciones sino prestar apoyo y colaborar con sus responsables". Destacó que se han practicado pruebas diagnósticas "prácticamente al 100% de residentes con síntomas" y que un 5% de las personas asintomáticas han dado positivo, así como que del total de las pruebas el porcentaje de positivos es del 35%.

Visitas. Sobre la posibilidad de visitar a los residentes, la gerente de la Anadp, Inés Francés, explicó que "no se pueden hacer visitas más allá de las que establece el protocolo" para las personas que están en "una situación de últimos días". Señaló que estas visitas se están llevando a cabo y se proporciona a los familiares los "medios de protección oportunos". Pidió "paciencia" al resto de personas con familiares en las residencias" y explicó que "en estos momentos vamos a trabajar en cómo tendrán que ser las visitas en un futuro cuando se vaya levantando el estado de alarma y cómo va a ser la desescalada". Subrayó que "el riesgo de contagio sigue existiendo y tenemos que preservar la salud de los residentes".

Mismo tratamiento. Carmen Maeztu precisó que se han realizado 2.150 PCR y 2.087 test rápidos así como que el tratamiento, tanto en casos confirmados como en los compatibles con los síntomas del Covid-19, "ha sido el mismo en cuanto a las medidas preventivas". Inés Francés apuntó que se van a hacer las pruebas en la residencia de Elizondo, donde se realizaron con medios privados, para confirmar resultados.

Formación para EPI. Inés Francés señaló que se ha creado un grupo de trabajo para la formación de personas en habilidades para el manejo de los equipos de protección y que también se ha formado en las propias residencias.

Carmen Maeztu. La consejera Carmen Maeztu reconoció la dureza de las cifras pero no ocultó cierta esperanza en como está evolucionando la pandemia en este sector de las residencias de personas mayores y de personas con discapacidad. "Aunque las cifras son muy duras, pues tras ellas hay personas con historias de vida y familias, hay motivos para la esperanza. Muchas superan la enfermedad y retoman su vida anterior. Y así lo prueba el dato de 81 personas que a día de hoy han recibido ya el alta. Se espera que en los próximos días se mantenga esta tendencia", manifestó en rueda de prensa.

"En todo momento las residencias han sido prioritarias y se han hecho más pruebas que en toda la sociedad"

Consejera de Derechos Sociales