- Profesionales de una treintena de centros privados de Educación Infantil (0-3 años) de Navarra mostraron ayer su preocupación por la complicada situación que atraviesan tras el cierre de las guarderías por la crisis del coronavirus e instaron al Gobierno foral a que les aclare cuándo van a poder abrir sus puertas.

Estos centros tenían la esperanza de poder ofrecer sus servicios cuando Navarra pasara a la fase 2, pero no va a ser posible. “Nos pusimos en contacto con Educación y nos ha contestado que, aunque no dependemos de ellos, no podemos abrir porque Navarra no hace propuesta en ámbito educativo para la reapertura de centros de Infantil, en este momento”. Los ayuntamientos les remiten a Salud, y éste “nos dice que no son quienes para fijar las medidas de la reapertura”.

Las centros de 0-3 años privados, que -según el informe del Consejo Escolar- dan cobertura a más del 30% de los niños/as de Navarra, “hemos puesto nuestra ilusión y esfuerzo diario para cubrir un servicio necesario y al que no llega la educación pública al 100%”. En la mayoría de los casos, se trata de “un autoempleo, en su mayor parte femenino, y no un negocio”.

Estas profesionales aseguran que “queremos seguir trabajando con nuestros niños y niñas, cumpliendo con las medidas que se determinen, y dar un servicio a los padres y madres que han confiado en nuestro trabajo y que ahora no saben dónde tener con quién dejar a sus hijos”. Tras explicar que llevan dos meses con “nuestras trabajadoras en ERTE y cumpliendo con los pagos que supone mantener estos centros”, estas trabajadoras reconocen que “si la situación se hace insostenible, muchas cerraremos y muchos niños se quedarán sin plaza”.

Por este motivo, solicitan que se tome ejemplo de las “actuaciones que se están siguiendo en otras CCAA en las que a través de bonos, están ayudando a que estos centros no tengan que cerrar.