La Policía Foral investiga la muerte de una varón cuyo cadáver fue localizado ayer en el techo del remolque de un camión en Alsasua procedente de Francia. El camionero, que detectó la presencia del cuerpo al detenerse en una estación de servicio, escuchó un fuerte golpe cuando aún se encontraba en suelo francés.
La aparición del cadáver, que correspondería a un ciudadano galo, se produjo sobre las 5.00 horas de ayer, cuando un transportista paró su vehículo para realizar el descanso obligatorio en una gasolinera situada en el kilómetro 2 de la carretera NA-1000, junto a la A-1 (Autovía del Norte). Al inspeccionar el camión, el chófer localizó en el techo de la cabina del camión un hombre aparentemente muerto.
El camionero, de origen extranjero, alertó del hallazgo al 112 y hasta el lugar se desplazó una patrulla de la Policía Foral adscrita a la comisaría de Alsasua, que confirmó la presencia del cadáver. Inmediatamente fueron movilizados hasta la gasolinera agentes de la División de Policía Judicial del Cuerpo autonómico para realizar las primeras diligencias, incluida la inspección ocular.
El transportista relató a los agentes de la Policía Foral que cuando aún se encontraba en territorio francés escuchó un golpe, al que tampoco prestó una especial atención inicialmente. Sin embargo, al detenerse en Alsasua decidió realizar una inspección del vehículo, momento en el que encontró el cuerpo de una persona.
El cadáver del fallecido, que presentaba un traumatismo craneoencefálico cuyas causas se investigan, fue conducido al Instituto Navarro de Medicina Legal y Ciencias Forenses, en Pamplona. Los agentes de la Policía Foral tomaron declaración al camionero, que posteriormente reanudó su ruta.
Aunque los investigadores mantenían ayer abiertas todas las hipótesis, se baraja la posibilidad de que el fallecido, que sería de origen francés, se habría precipitado sobre la carretera en algún paso elevado y habría caído sobre el camión, provocándose la muerte. No obstante, serán los resultados de la autopsia y la investigación policial los que puedan clarificar lo sucedido.
Los agentes de la Policía Foral comunicaron ayer a la juez de guardia en Pamplona la apertura de un atestado por la aparición del cuerpo y también se pusieron en contacto con la Gendarmería francesa. Una vez que el Cuerpo autonómico concluya las diligencias, estas serán remitidas a la Policía gala para que prosiga con las pesquisas.
