Educación aboga por convocar procesos de selección de personal docente en los que se requiera la acreditación de lengua extranjera para dar estabilidad al profesorado que imparte clases en el Programa de Aprendizaje en Idiomas. Una propuesta que, según afirmó ayer el consejero Carlos Gimeno, cuenta con el respaldo de todas las CCAA, “puesto que además es una cuestión que es voluntaria, no obligaría”. La pelota está ahora en el tejado del Ministerio de Educación, que debe debatirlo con los sindicatos en la Mesa Sectorial del Estado antes de tomar una decisión.

El objetivo de esta iniciativa, que ya ha sido rechazada por los sindicatos LAB, Steilas, ELA y UGT, es “estabilizar las plantillas y estabilizar los proyectos educativos de los centros, con el fin último de mejorar la calidad del sistema educativo, sobre todo, público, que es donde más implantación tiene el programa”. El PAI, recordó Gimeno “fue impulsado por un Gobierno, otro Gobierno lo mantuvo y hoy en día es una realidad”. En este sentido, el consejero informó de que este curso 32.844 alumnos cursan este programa de aprendizaje en inglés. “El PAI está en el 73% de los centros de modelo A y G y en el 20% de los de modelo D, y llega al 64% del alumnado de Infantil, el 61% del alumnado de Primaria y del 23% de ESO”, remarcó Gimeno, quien añadió que hoy en día hay 800 plazas en el programa PAI sin estabilizar. “Eso genera cambios continuos en las plantillas de los centros públicos, lo cual dificulta los proyectos educativos y la concreción de los proyectos curriculares”, aseveró.

El Departamento, recordó Gimeno, ya intentó que se introdujera la posibilidad de acreditar una lengua extranjera en los procesos de selección pero “hasta ahora no lo hemos conseguido introducir ni en el real decreto que regula el acceso a la función pública docente ni en la tramitación de la Lomloe. Los servicios jurídicos del Departamento, añadió, “han visto la posibilidad de acreditar el conocimiento de una determinada lengua extranjera en la misma similitud que se produce con las enseñanzas artísticas. Por ejemplo, los catedráticos de conservatorio acreditan una determinada suficiencia investigadora”.

Ahora bien, la decisión final la tiene el Ministerio ya que esta propuesta exigiría una pequeña modificación de la legislación. “El Departamento quiere una plantilla estable y una mejora de la calidad educativa en todos los programas”.