Navarra Suma y EH Bildu han considerado "incompleto" el informe que elaboró la Cámara de Comptos respecto a la gestión que ha realizado el Gobierno de Navarra durante la pandemia, informe que concluye que el Ejecutivo ha gestionado "de manera razonable la crisis sanitaria en lo referido a contratación de personal, obras, suministros, servicios y concesión de subvenciones".

NA+ ha precisado que considera que el informe es "incompleto no por causas atribuibles al auditor, sino a quien ha sido auditado", y ha sostenido que "la conclusión más demoledora del informe es que no es posible cuantificar el número de contratos realizados un año después". Por su parte, EH Bildu ha afirmado que "hay aspectos en los que el informe de Comptos es demasiado complaciente con el Gobierno" y no ha descartado pedir la ampliación de algunos aspectos recogidos en el trabajo.

Por el contrario, el PSN considera que la situación extraordinaria provocada por la pandemia da "más valor si cabe a la conclusión de la Cámara de Comptos respecto a la gestión de la crisis" y ha defendido el trabajo realizado por el Gobierno foral.

La presidenta de la Cámara de Comptos, Asun Olaechea, ha presentado este miércoles en el Parlamento de Navarra, a petición de PSN y EH Bildu, el informe. En el año transcurrido desde que se inició la crisis, el Gobierno de Navarra ha gastado 253 millones en hacer frente a la misma. En este periodo, ha hecho algo más de 7.500 contratos, de los que 5.300 corresponden al Servicio Navarro de Salud.

El Gobierno foral gastó el año pasado 225 millones para hacer frente a la crisis e ingresó 187 millones procedentes de las ayudas del Estado. De los 225 millones gastados, 101 corresponden al Departamento de Salud, 43 a Desarrollo Económico y Empresarial, 26 a Cohesión Territorial, 18 a Educación y 17 a Derechos Sociales.

Analizados los contratos y subvenciones tramitadas en 2020, la Cámara de Comptos señala que, en general, se ha cumplido la normativa aplicable en este tipo de situaciones extraordinarias. Existe, no obstante, una salvedad referida a las ayudas a autónomos que sumaron 24 millones. Según lo establecido en la convocatoria, los profesionales presentaron una declaración sobre su capacidad económica, que debía cumplir unos límites para acceder a las ayudas. El informe constata que el Gobierno no comprobó el cumplimiento de ese requisito. En las posteriores ayudas aprobadas a la hostelería y turismo sí se articuló un mecanismo de comprobación de los datos a posteriori.

Respecto a la eficacia y eficiencia de los contratos, Comptos señala que la gestión de los conciertos sanitarios ha cumplido estos principios.

En cuanto a la gestión de servicios sociales garantizados, Olaechea ha explicado que la Agencia Navarra de Autonomía y Desarrollo de las Personas (ANADP) asumió como gasto extraordinario 2,15 millones para seguir prestando estos servicios en centros concertados. Este incremento está relacionado con contrataciones de personal. "La Agencia acordó abonar a cada centro de manera individual los gastos en los que había incurrido según la información que los centros le remitían. La agencia realizó unos cálculos complejos y laboriosos pero no verificó si la información proporcionada por los centros, referida a personal, que ascendía a 1,18 millones, era correcta. Al respecto, la agencia va a solicitar la justificación de estos gastos", ha señalado Asun Olaechea.

En el capítulo de recomendaciones, Comptos plantea "articular procedimientos factibles de verificación de los requisitos exigidos para ser beneficiario de ayudas, verificar en una muestra de centros sociosanitarios la justificación de los gastos extraordinarios remitidos a la ANADP y formalizar todos los expedientes de contratación tramitados por emergencia y publicarlos en el portal de contratación".

En el turno de intervención de los grupos, la portavoz del PSN, Ainhoa Unzu, ha afirmado que "prácticamente el mismo día que estalló la pandemia el Gobierno tuvo que tomar decisiones de carácter extraordinario y en un escenario de extrema dificultad se adoptaron unas decisiones que se han tenido que ir adaptando a la evolución de la pandemia". Por eso, ha dicho que "adquiere más valor si cabe la conclusión de la Cámara de Comptos respecto a la gestión de la crisis, considerando que se ha hecho de manera razonable". No obstante, Unzu ha reconocido que "se debe aprender también de los errores" y el Gobierno debe "tomar nota de las recomendaciones que hace Comptos".

La portavoz de EH Bildu, Bakartxo Ruiz, ha afirmado que tiene "un punto de decepción en algunos aspectos" del informe, considerando que "no se han analizado con la suficiente profundidad" determinadas cuestiones relativas por ejemplo a la contratación de personal, las ayudas a autónomos o los conciertos sanitarios. "Hay aspectos en los que el informe de Comptos es demasiado complaciente con el Gobierno, hay flecos pendientes que señala el propio informe que requieren de un análisis más profundo y vamos a valorar solicitar en algunos aspectos la ampliación de este informe", ha señalado.

Por su parte, el portavoz de Navarra Suma, Juan Luis Sánchez de Muniáin, ha considerado que el informe es "incompleto, pero no por causas atribuibles al auditor, sino a quien ha sido auditado" y ha rechazado que el PSN adopte una actitud "triunfalista" por el contenido del informe. "No es un informe de gestión sobre la pandemia, no se juzga si se hicieron bien o mal los rastreos o las PCR, si se actuó bien para mitigar la entrada del virus en las residencias, o si las ayudas fueron suficientes", ha dicho, para señalar que "la conclusión más demoledora del informe es que no es posible cuantificar el número de contratos realizados un año después". "Son unas conclusiones abiertas", ha afirmado.

El portavoz de Geroa Bai, Mikel Asiain, ha afirmado que, "sin pretender caer en la autocomplacencia, la conclusión final general es positiva más allá de una serie de recomendaciones que también hace la Cámara de Comptos". Asiáin ha destacado "la legalidad de las contrataciones realizadas" y el "significativo gasto de 225 millones entre marzo y diciembre, la contratación de 3.407 personas, la percepción extraordinaria de 187 millones provenientes del Estado, el apunte de que seguimos inmersos en la propia pandemia y el gasto de casi 29 millones de euros entre enero y marzo de este año".

Por parte de Podemos, Mikel Buil ha compartido las prioridades de gasto del Gobierno de Navarra durante la pandemia y se ha dado por "satisfecho con la gestión de los 225 millones de euros". "Compartimos las recomendaciones de la Cámara de Comptos y vamos a trabajar sobre ellas", ha dicho, para señalar que "el Departamento de Desarrollo Económico fardaba con razón de la rapidez con la que se han podido tramitar las ayudas" a los sectores afectados, una rapidez que ha avalado, aunque ha planteado que convendría que Comptos se pronunciara sobre este procedimiento.

Por último, la portavoz de Izquierda-Ezkerra, Marisa de Simón, ha afirmado que "la distribución del gasto se corresponde con lo que se ha aprobado en el Parlamento a lo largo de estos meses y los procedimientos de urgencia existen, son legales y han sido asumidos por este Parlamento". Ha reconocido que ella fue "muy crítica" con el sistema de conciertos sanitarios, pero ha dicho que éste "no es el momento" de abordarlo. "Hay que verlo y habrá que hacer un análisis en cuanto salgamos de esta pandemia", ha subrayado.