El juego patológico, la ludopatía o adicción al juego, como problemas de salud, no son nuevos. Sin embargo, actualmente, hay razones que complican su prevención y abordaje: la gran oferta, variedad y rápido crecimiento y accesibilidad del juego, tanto en salones como a través de Internet; el papel de las tecnologías que favorecen la inmediatez y velocidad de la recompensa, la invitación publicitaria a jugar; y la a mayor extensión y normalización en el ocio juvenil, que hace que llegue a más personas, más diversas y con notable descenso en las edades de inicio.

LEA TAMBIÉN La covid solo desinfló las apuestas un 23%: se jugaron 71,28 millones de euros en Navarra

Por ello, el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN) anima a la ciudadanía a reflexionar sobre sus hábitos y a plantearse cuándo su relación con el juego puede ser un problema, ya que existen comportamientos que dan indicios de que se puede estar ante una situación de riesgo: por ejemplo, pensar constantemente en disponer de dinero para jugar, seguir apostando a pesar de las experiencias negativas, o mentir para ocultar su participación en juegos de azar, entre otras.

Otra clave que se debe tener en cuenta, según destacan desde el ISPLN es que el enganche a este tipo de juegos se produce habitualmente durante la fase en la que se gana dinero y, después, cuando se registran pérdidas, ya resulta más difícil dar marcha atrás. Responder a las seis preguntas anexas puede servir de ayuda.