Miembros y representantes de Osasuna acompañaron a la directiva del club rojillo con motivo del recibimiento de la Medalla de Oro en el Claustro Isabelino de la sede del Departamento de Cultura. Todos ellos coincidían en la satisfacción y orgullo que les producía recibir tal condecoración. Sin olvidarse, en algunos casos de todos aquellos que han formado parte de la entidad durante su centenaria historia.

Además de la directiva, trabajadores del club como Iñaki Ibáñez, Pedro Arozarena, Patxi Puñal o Miguel Flaño; representantes de Osasuna Veteranos como Ángel López; Juan Pérez en nombre del primer equipo o miembros de la plantilla del primer equipo femenino como Kakun Mainz, Mai Garde o Leyre Fernández, asistieron al acto.

Para el delegado del primer equipo, Iñaki Ibáñez, la Medalla de Oro significa “el compromiso y el arraigo de lo que uno representa con la camiseta de Osasuna y la cercanía que transmite la afición y la gente que no es aficionada al fútbol pero que tiene cariño por esta institución. Nosotros, los que estamos dentro del club, trabajamos de una manera diferente, pero el orgullo es el mismo, porque somos las dos caras de la misma moneda”.

En esa misma línea se pronunciaba Miguel Flaño al admitir que “es la máxima distinción en la Comunidad y para mí hay dos palabras que recogían el acto: esa emoción y ese sentimiento de lo que significa Osasuna y a partir de ahí se va a construir todo. Es día de dar la enhorabuena a Osasuna como institución y más concretamente a cada uno de los que hemos formado parte de la institución, que hemos sido tantas y tantas personas, en la mayoría de los casos anónimas y que se merecen ese reconocimiento por haber conseguido ir transmitiendo lo que transmite Osasuna”.

Esa idea de unidad transmitió Juan Pérez. Además del “orgullo, junto con el Centenario, además por el día que es, que es el día de Navarra, agradecemos mucho que nos hayan condecorado y estamos muy emocionados”, el portero de Osasuna se acordó de “todos los que formamos parte del día a día. Desde nosotros, los jugadores, hasta los trabajadores, empleados, aficionados... Sin todo eso en general no podríamos haber conseguido nada de lo que hemos logrado”.

Patxi Puñal, por su parte, apuntó que el fondo del reconocimiento es “todo lo representa Osasuna, esa integración social que el club lo hace a las mil maravillas. La verdad que hace ilusión, enorgullece mucho. Me emociono mucho al ver al presidente, que es un hombre entrañable y de todo corazón y representa lo que es el club a las mil maravillas. Dicen que el halago debilita, pero también es cierto que a todos nos gusta recibir una palmadita en la espalda y este es el máximo exponente de los premios que se pueden recibir en Navarra”.

Precisamente a los halagos hizo referencia Ángel López, coordinador de Osasuna Veteranos, al señalar que “es un halago de un gran nivel. Que le den al club la insignia de oro de Navarra es el emblema más importante de Navarra y de todos los navarros. A nosotros los veteranos y colaboradores, por la parte que nos ocupa, no cabe duda de que nos hace estar tremendamente satisfechos”.

Por último, César Muniáin, vicepresidente segundo del club refrendaba el “orgullo y una satisfacción terrible ver que el Gobierno de Navarra reconoce el trabajo de Osasuna y lo que representa en la sociedad navarra. Estamos disfrutando del momento y orgullosos de esta medalla. Evidentemente cuando estás dentro y trabajas en el día a día y sabes el esfuerzo que supone estar dentro con el cariño y entusiasmo con lo que lo hacemos, cuando te reconocen el trabajo y la parte que hemos aportado en estos años en los que hemos estado se disfruta de otra manera. Como osasunista y socio se disfruta de una manera, pero cuando eres parte activa se disfruta mucho más”.