Navarra detectó el jueves 10 de febrero al menos 432 nuevos casos de infección por covid-19, según el dato diario facilitado por el Departamento de Salud, de nuevo la cifra más baja en día lectivo desde el 30 de noviembre. Están muy por debajo de los 936 de hace 7 días y de los 1.534 de hace 14. El miércoles los contagios detectados ascendieron a 576 tras añadirse más autotest a los 545 notificados ayer. En lo que va de semana los positivos acumulados son aproximadamente la mitad respecto a la semana anterior (2334-4475, -48%). Continúa por tanto la buena evolución de los números epidemiológicos, con una incidencia a 14 días ya por debajo de 1.800 casos, y que han servido para el que el Gobierno foral decida retirar el grueso de las restricciones a partir del 15 de febrero.

Actualmente son 167 las personas hospitalizadas por covid-19, 9 menos en 24 horas, 21 de ellas en la UCI, dos menos. Hace una semana eran 223, 28 en críticos. Este jueves se notificaron tres fallecidos por covid y se registraron 8 ingresos hospitalarios, ninguno de ellos en la UCI.

REORGANIZACIÓN DEL HOSPITAL UNIVERSITARIO La sexta ola va a suponer un punto de inflexión en la pandemia. Ya lo adelantó el miércoles la consejera de Salud, Santos Induráin, tras anunciar el fin de las restricciones y ayer lo corroboraron el director gerente del Hospital Universitario de Navarra (HUN), Alfredo Martínez, y Juan Pedro Tirapu, coordinador de las plantas UCI, en un entrevista concedida a este periódico. "La sexta ola va a ser un punto de inflexión en la pandemia y de cara la futuro la idea es reorganizar los hospitales y montar dispositivos de contingencia que sean flexibles para adaptarnos a lo que pueda venir", explica Martínez.

De lo que se trata es de que una parte de los hospitales quede reservada para atención específica de covid. En el caso del HUN, detalla su director gerente, la idea es que una mitad de la 5ª planta y otra mitad de la 6ª se destinen a covid y que en las UCI haya una reserva de al menos 6 camas para atender el virus. "También es importante mantener el refuerzo de Urgencias, que en esta sexta ola se ha visto desbordada, y del laboratorio de Microbiología, para estar alerta de futuras nuevas variantes", señala Martínez.

ESTRÉS CRÓNICO DE LA PLANTILLA Esta reconversión se va a hacer teniendo en cuenta la situación de cansancio de los profesionales. Según apunta Tirapu, los sanitarios sufren ya "estrés crónico" tras dos años empalmando olas. "La gente tiene ganas de desconectar porque tanta tensión al final afecta a nuestra vida", destaca el coordinador de las UCI, que se siente "orgulloso" de unos profesionales que "han conseguido dar respuesta y gracias a su compromiso la atención a los pacientes siempre ha estado garantizada".

DATOS POR MUNICIPIOS Pamplona acumuló ayer al menos 121 positivos, según la primera cifra provisional del Gobierno foral. Destacan los 17 del II Ensanche, los 14 de Iturrama, los 13 de Rochapea, los 12 de Azpilagaña, los 11 de San Juan y Ermitagaña y los 10 de San Jorge y Txantrea. Tras la capital navarra Sarriguren y Tudela notificaron 22 en total, Barañáin 16, Mutilva 13, Burlada y Olite 11, Estella-Lizarra 10, Zizur 9, Corella 8, Berriozar, Beriáin y Cintruénigo 7...:

"Nos preocupa mucho el verano"

Pese a la buena evolución de la pandemia y de las hospitalizaciones en las últimas semanas, Alfredo Martínez, director gerente del Hospital Universitario de Navarra (HUN), y Juan Pedro Tirapu, coordinador de las plantas UCI, siguen con la alerta encendida. "La tendencia es buena, disponemos de personal y ahora el hospital está fuerte, pero nos preocupa la aparición de ómicron BA.2 (conocida como la silenciosa), porque es más contagiosa y habrá que ver si presenta algún tipo de escape a los anticuerpos de la vacuna o a los propios de la enfermedad", sostiene Martínez.

Por ello, aunque los sanitarios empiezan a coger aire tras una sexta ola asfixiante, en los hospitales todavía siguen ojo avizor ante posibles nuevas olas. Para empezar, según los responsables del hospital, "el descenso va a ser lento, va a costar bajar la presión hospitalaria", lo que va a retrasar que se pueda recuperar la normalidad a nivel asistencial. Y mientras van cogiendo aire, miran de reojo a la Semana Santa pero ponen todas las miradas un poco más allá: en el verano. "Nos preocupa la aparición de nuevas variantes pero también los momentos en los que más socializamos y hay más movilidad, que son las vacaciones. Primero están las de Semana Santa, que la tenemos ahí, pero lo que más nos preocupa es el verano, porque va a ser una explosión de socialización y con una cepa que sea más contagiosa no sabemos qué puede pasar", alerta Martínez.

MANTENER MEDIDAS INDIVIDUALES De cara a evitar que una eventual séptima ola comprometa al sistema sanitario como lo ha hecho esta sexta, Martínez insta a la población a mantener las medidas de protección individual: "Esta claro que la tendencia es ir a menos restricciones, y debe ser así; pero la prevención individual hay que mantenerla porque no tiene ningún riesgo y no nos supone tanto llevar la mascarilla en interiores, ventilar bien los espacios y lavarnos bien las manos".

Asimismo, Martínez y Tirapu instan a la población a vacunarse contra la covid-19 ya que sus efectos son claros. "Alrededor del 50% de las personas que han ido ingresando en la UCI por covid estaban sin vacunar y desde que se inició el proceso de vacunación ha decaído el riesgo de muerte. En la quinta ola fallecieron 4,4 personas por cada 1.000 contagios y en esta sexta ola se ha conseguido reducir a 1 por cada 1.000", defiende Tirapu.

El perfil de los pacientes en UCI

No estar vacunado, ser inmunodeprimido o tener obesidad son tres de los principales factores que hacen que una persona contagiada de covid-19 pueda acabar en la UCI con un cuadro grave. Actualmente hay 23 pacientes ingresados en cuidados intensivos en Navarra y, según explica el coordinador de las plantas UCI del Hospital Universitario de Navarra (HUN), Juan Pedro Tirapu, el perfil medio de estos pacientes es el de un hombre de entre 55 y 75 años que o no está vacunado, o es inmunodeprimido, o tiene obesidad o alguna patología de riesgo previa. "En la UCI ingresan por coronavirus muchos más hombres que mujeres y por lo general mayores de 50 años. Destaca mucho que de todos los pacientes que han pasado por estas unidades en la sexta ola la mitad no estaban vacunados, ese es un factor fundamental", subraya Tirapu, que la obesidad es uno de los principales factores de riesgo para desarrollar un covid grave, así como ser inmunodeprimido.

No obstante, la situación dentro de las UCI ha evolucionado mucho durante la pandemia y a un mayor conocimiento y mejor tratamiento se suma el efecto de la vacuna, que ha reducido considerablemente la mortalidad: "En la primera ola la mortalidad de los pacientes covid en UCI era del 31% y ahora la hemos bajado al 9%".

La sexta ola llevó al límite a los hospitales

Lo vivido en los hospitales en esta sexta ola se puede equiparar a los peores momentos de la pandemia. Así, al menos, lo exponen el director gerente del Hospital Universitario de Navarra (HUN), Alfredo Martínez, y Juan Pedro Tirapu, coordinador de las plantas UCI de este centro, en una entrevista concedida a este periódico. Ambos coinciden en que nada se puede comparar a la primera ola de la pandemia, en la que llegó a haber 95 pacientes en críticos y se habilitaron hoteles para poder atender a todos los ingresados, pero que desde entonces esta sexta ola -junto a la segunda (julio-diciembre de 2020)- ha sido uno de los momentos más críticos de lo que llevamos de pandemia, principalmente por la alta presión asistencial por la falta de profesionales y en el que se han asumido 1.253 ingresos en tres meses.

"A nivel de hospitalización esta sexta ola ha sido peor que la tercera (enero-marzo de 2021), la cuarta (abril-mayo de 2021) y la quinta (julio-septiembre de 2021). Lo que ha pasado es que se han superpuesto dos olas, la de delta y la de ómicron, que han llevado a unas incidencias altísimas que ha afectado a mucha población vulnerable", explica Martínez. En la misma línea, y para dimensionar bien lo que ha sido esta sexta ola a nivel hospitalario, Tirapu detalla que a principios de enero "se tuvieron que doblar dos boxes de UCI con dos camas y se habilitaron cuatro salas de Endoscopias para cuidados intensivos para poder atender el covid. Esto es algo que no ocurría desde noviembre de 2020".