La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha realizado 206 actuaciones de conservación y mantenimiento de cauces de ríos en Navarra en los últimos once años, pero sólo seis de ellas han tenido como objeto los ríos que inundaron la Comarca de Pamplona el pasado mes de diciembre. Desde 2011, tan sólo se han realizado cuatro intervenciones de limpieza en el río Ultzama, mientras que en el Arga se han efectuado seis, pero sólo dos de ellas han sido aguas arriba de la capital navarra, ambas en Huarte, que suman un gasto total de 18.156,49 euros, apenas un 0,7% de toda la inversión en esta materia desde el año 2011.

Así se desprende de la información que ha facilitado el organismo hidrográfico regulador en respuesta a las preguntas formuladas por el senador autonómico Koldo Martínez (Geroa Bai), tras el episodio extraordinario registrado durante el pasado mes de diciembre, que causó daños por valor de unos 60 millones de euros. "Amplios colectivos y algunos partidos como Geroa Bai han apuntado a la falta de limpieza de los cauces como un elemento acelerante de los desbordamientos", apunta Martínez, que se interesa por los criterios de la CHE para acometer o autorizar la limpieza de los cauces de los ríos bajo su supervisión y sobre el número de actuaciones en los últimos años.

Los trabajos de limpieza de los cauces comprenden la retirada de basuras y otros residuos sólidos urbanos depositados en los mismos, una competencia que recae en las entidades locales, directamente o a través de organizaciones supramunicipales. Al respecto, la CHE indica que "las actuaciones son autorizadas siempre y cuando supongan un incremento de la sección de desagüe del cauce y que por su realización no sean previsibles afecciones significativas al mismo o a las corrientes en régimen de avenidas, siempre que la extracción de los depósitos del lecho del cauce no suponga una modificación destacable de la dinámica fluvial y se respete la vegetación arbórea y arbustiva presente en los taludes".

206 INTERVENCIONES

La CHE ha realizado o autorizado en los últimos once años un total de 206 actuaciones, tanto a particulares como a administraciones locales o autonómica, por un importe total de 2,58 millones de euros. "Algunas de ellas no son actuaciones puntuales, sino que, dado el carácter periódico o recurrente de las solicitudes, los interesados, por lo general Ayuntamientos, han quedado autorizados a realizar labores de limpieza y mantenimiento de un determinado cauce por un periodo o de 4 años", advierte la CHE.

El río Cidacos, que en julio de 2019 fue el causante de la gran inundación registrada en Tafalla y en numerosas localidades de la Zona Media, se encuentra en el primer puesto con 36 actuaciones de limpieza, por un importe de 508.702,35 euros, una quinta parte del total gastado por la CHE desde 2011 en Navarra. El Queiles, con 29 actuaciones (200.632,18 euros), y el Ega, con 22 (407.110,70 euros), ocupan los siguientes puestos.

Tras el río Alhama (14 acciones y 114.834,99 euros) y el Erro (9 y 33.195,80 euros), emerge el río Arga, en el que se han realizado seis intervenciones de conservación y mantenimiento, por un importe de 281.782,42 euros, pero sólo dos de ellas aguas arriba de Pamplona: en 2015 por 1.331,88 euros y en 2020 por 11.255,71, ambas en Huarte. Por su parte, se realizaron cuatro acciones en el Ultzama (años 2020 y 2021) por una suma de 5.568,90 euros.

En este sentido, el dinero que ha gastado la CHE en los últimos once años para mantener limpios los cauces del río Arga y su afluente Ultzama, responsables de las inundaciones que se producen en la Comarca de Pamplona, suman un importe de 18.156,49 euros, un 0,7% de la cantidad total invertida en en este periodo en toda la cuenca del Ebro en la Comunidad Foral.

Si se analizan las actuaciones en otro ríos afluentes del Arga, aguas abajo de la capital navarra, tampoco el número de intervenciones y el gasto realizados son desmesurados: en el río Arakil se han llevado a cabo cinco actuaciones (320.353 euros); cuatro en el Elorz (21.502,66 euros) y cuatro en el Juslapeña (11.606,68).

INCREMENTO DE LAS ACTUACIONES

No obstante, durante los últimos tres años, coincidentes con Gobiernos progresistas, el número de actuaciones y el gasto para limpiar los ríos de la cuenca del Ebro en Navarra se ha incrementado notablemente en comparación con los ocho años precedentes en los que el PP estuvo en La Moncloa), ya que durante el periodo 2019-2021 se llevaron a cabo 154 acciones, frente a las 53 que hubo en el periodo 2011-2018. En el año 2019 se ejecutaron 73 intervenciones (431.670,75 euros), en 2020 hubo 55 (302.587,07 euros) y en 2021, 26 (978.377,69 euros).

En cuanto a las actuaciones que ejecuta la propia CHE, el organismo regulador desarrolla anualmente un programa de conservación y mantenimiento del dominio público hidráulico que comprende las nueve Comunidades Autónomas que pertenecen a la Demarcación Hidrográfica del Ebro. El proceso de trabajo se inicia con una recopilación de información sobre las posibles actuaciones, que se priorizan según la probabilidad de que con un evento de crecida ordinaria se deriven daños a personas, infraestructuras o bienes y, tras una visita de campo, se programan las intervenciones.

Elemento clave contra las crecidas

Corte de vegetación "necesario"

Previene la erosión. La CHE afirma que la actuación de limpieza se considera "autorizable" siempre que "se corte la vegetación estrictamente necesaria, respetando los pies arbóreos y arbustivos". En este sentido, resalta que "la vegetación de ribera tiene una función básica en la prevención de la erosión del cauce y sus orillas, en el mantenimiento de la calidad de las aguas, así como ayudando a atenuar los efectos de las crecidas y avenidas, ya que disipa la energía de la corriente, mejora la infiltración de agua y por tanto retira caudal líquido; cohesiona y sujeta el suelo y ayuda a la retención de sólidos en suspensión".