Eva Casanueva, la madre de la joven sevillana Marta del Castillo, asesinada en 2009, volvió a ver el viernes ante un juzgado a Francisco Javier García, el Cuco, quien fue condenado cuando era menor por un delito de encubrimiento de esta muerte, y le ha dicho: “No eres capaz de mirarme a la cara, ¿verdad, cobarde?”, tras pasar por delante de él cuando terminó de declarar.Trece años después de que asesinaran a su hija, Eva Casanueva y su marido, Antonio del Castillo, siguen luchando por conocer dónde se encuentra el cuerpo de su hija y el viernes tuvo la oportunidad de coincidir en una sala con uno de los condenados entonces por aquel asesinato, aunque en esta ocasión se le juzgaba por un delito de falso testimonio en el juicio que condenó a Miguel Carcaño a 21 años de prisión.

Eva Casanueva fue la primera en comparecer en la segunda y última jornada del juicio contra el Cuco y su madre por falso testimonio y tras hacerlo quiso permanecer en la sala. Una vez que respondió a las preguntas de la letrada de la acusación, pasó por delante de los acusados y les lanzó una mirada de desprecio, sin apartarles la vista hasta que tomó asiento en medio de la sala.

Pero no fue hasta que la jueza dejó visto para sentencia el caso y pidió desalojar la sala cuando la madre de Marta del Castillo volvió a pasar por delante del Cuco y le hizo esa pregunta, que en ese momento no fue escuchada por los periodistas pero que ella confesó posteriormente a la prensa a la salida del juicio.

Pregunta a la madre

Según explicó la madre de Marta del Castillo, le habría gustado también preguntarle a la madre del Cuco si se considera “una buena madre haciendo que su hijo esté casi tres años en un centro de internamiento sabiendo supuestamente que no hizo nada”, y aprovechó para arremeter contra el abogado de la defensa, Agustín Martínez, de quien dijo que podría ganar “un Goya” tras haber oído sus conclusiones en la sala.

“Sólo queríamos demostrar el falso testimonio, pero el falso testimonio no es que diga: ‘Sí, estuve en esa casa’”, sino que diga “qué estuvo haciendo, ver una película o vio una niña muerta en el suelo”, subrayó Casanueva.

Los padres de Marta fueron los grandes protagonistas de la segunda y última jornada de un juicio que prometía sorpresas y que solo tuvo una: el reconocimiento de las acusaciones por parte del Cuco. Algo que probablemente ha trastocado la estrategia de la defensa, una vez que la jueza dictaminó que no se admitirían pruebas ni testimonios una vez que los acusados admitían los hechos. Esto llevó a la letrada de la acusación a pedir a la jueza que reconsiderara su decisión, pero la jueza recordó que “solo aplico la ley, guste o no”.