Bendito sufrimiento
el san antonio suma su primera victoria a costa del cuenca de zupo equísoainEl Amaya Sport inaugura su casillero a base de intensidad en un encuentro de alto voltaje
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AMAYA SPORT SAN ANTONIO Lucau (p), Gedeón (4), Humet (2), Víctor (2), Urdiales (3), Rasic (5), Alberto (2), Arkaitz, Eloy (3), Borragán (1), Mindegia, Meoki (2), Ristanovic (ps) y Vasko Sevaljevic (5, 1p).
CUENCA 2016 Kappelin (p), Corzo (5), Sabonis, Mendoza (1), Markovic (5, 3p), Grosas (1), Rodríguez (2), Paván (5), Ivankovic (2), Arias, Da Costa (3) y López (1).
Marcador cada cinco minutos 2-2, 6-4, 10-5, 12-8, 13-12, 14-13 (descanso); 15-15, 18-16, 19-19, 22-20, 24-21, 29-25.
Árbitros Raluy y Sabroso (Canarias). Excluyeron dos minutos a los antonianos Gedeón, Borragán y Vargas, y a los visitantes Mendoza (2) y Sabonis (2).
Incidencias Partido de la segunda jornada de la Liga Asobal celebrado en Arrosadia (debido a la Navarparty) ante unos 750 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria del ex directivo del San Antonio Miguel Manso. En el minuto 19 se retiró lesionado Niko Mindegia.
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pamplona. El extenuante ejercicio de entrega e intensidad del San Antonio tuvo ayer premio, y el equipo navarro estrenó su casillero sumando de dos en dos a costa del Cuenca 2016 de Zupo Equísoain. Ambos equipos, muy parejos sobre la cancha, protagonizaron un encuentro vibrante que, además de puntos, dejó varias buenas noticias para los de casa. Las mejores fueron la actitud general del equipo, el buen nivel en portería y la mordiente desde el lateral izquierdo. Y la única cruz la puso la lesión de Mindegia, que podría tener un esguince de rodilla.
A falta de grandes individualidades, a este Amaya Sport San Antonio de vacas flacas le toca partirse la cara en cada partido. Cada punto esta temporada costará sangre, sudor y lágrimas. Por eso el equipo acabó celebrando el triunfo como si hubiese ganado la Champions. Y por eso el San Antonio salió desde el pitido inicial con los puños bien apretados. Los de Zupo Equísoain, un equipo con más kilos que calidad, no fueron menos, y el comienzo de encuentro fue un intercambio de golpes en el que al San Antonio le tocó ir a remolque. Hasta que Rasic comprobó que su brazo derecho carburaba.
En el minuto 7 el espigado lateral serbio se desmelenó y, con el equipo a sus espaldas, protagonizó un parcial de 7-1 (minuto 14, 10-5). En apenas siete minutos el equipo navarro se había metido el partido en el bolsillo. Pero antes del descanso Mindegia se lesionó, el San Antonio empezó a dudar y el Cuenca se acercó en el marcador aprovechando tres exclusiones entre los locales (descanso, 14-12).
Con los dos equipos dispuestos a morir por llevarse los puntos, quedaba por delante media hora que prometía, y desde luego no defraudó. La segunda mitad empezó como un correcalles. Y como en la primera el partido se empezó a desequilibrar desde el lateral izquierdo. Vasko tomó el relevó de Rasic y empezó a dar muestras de su poderío. En meta Ristanovic comenzó a pararlo todo y, pasado el ecuador de la segunda mitad, el San Antonio volvió a poner el choque cuesta abajo (min. 48, 22-19). Pero tampoco entonces se rindió el Cuenca de Zupo Equísoain, que metió la directa. El San Antonio volvió a notar el aliento del Cuenca en el cogote a falta de tres minutos para el final. De nuevo tocaba sufrir. Pero el San Antonio no se achicó y gracias a un gran Ibai Meoki en la recta final logró amarrar dos puntos muy sufridos.