¿Sabes como elegir y cocinar bien las verduras para que no pierdan sus nutrientes?
Las verduras que se han cosechado en su momento óptimo, son las que más nutrientes nos aportan. En ese momento justo de la recogida.
La densidad de los nutrientes que aportan las verduras es muy importante. La Universidad de Valencia está haciendo distintos ensayos, en los que se demuestra que, en muchas ocasiones, parte de las verduras que consumimos tienen una baja concentración de algunas vitaminas y un descenso de sustancias antioxidantes, y esto es debido a distintos factores.
Campos de cultivo de VERLEAL, seleccionado bajo los más exigentes análisis para cada una de sus verduras.
Tres enemigos de las verduras
La sobrexplotación de la tierra genera un suelo exhausto, una tierra que pierde sus nutrientes y que ni el aporte de fertilizantes, por parte de los agricultores, consigue que sea un suelo fértil . Por eso, es tan importante la rotación de los cultivos, así como darle un respiro a la tierra, un descanso para que coja fuerza.
Desde la empresa navarra de verduras congeladas Verleal, inciden en los elementos fundamentales para conseguir verduras con un alto aporte de nutrientes: Elegir los campos más aptos y mejor cuidados para cada una de las variedades es una de las claves. Esta dedicación consigue que las verduras tenga un sabor excepcional y una gran calidad.
Otro problema, con el que nos encontramos, es la sustitución de variedades tradicionales por especies vegetales optimizadas mediante mejoras genéticas, con el fin de ser más productivas. Uno de los trabajos importantes en el proceso del cultivo de verduras es la selecciónn de las semillas para asegurar que el producto sea de calidad y mantenga todos sus nutrientes.
La recolección de la cosecha puede representar otro problema que incide directamente en la calidad de las verduras. Es importante evitar recolecciones tempranas, como en algunos casos que se realizan con 15 o 20 días de anterioridad, puesto que éstas verduras pasan directamente a cámaras frigoríficas donde, en muchos casos, no se pueden sintetizar los nutrientes fundamentales de cada una de las variedades. Además, a esto debemos sumar el problema del transporte de las cosechas que, a veces, también interviene negativamente en su calidad final.
Cuidar las semillas asegura un producto de calidad (Foto: VERLEAL)
¿Quieres saber si la verdura que consumimos se ha sido recogida en su momento óptimo?
4 consejos que harán que tu elección sea perfecta.
–Judía Extrafina: Debe tener un color verde homogéneo, sin vetas marcadas, colores marrones o pardos. Por supuesto, no debe tener manchas, y sabremos si han sido “mimadas” si no aparecen rotas.
–Guisantes: De nuevo el color verde fresco y homogéneo debe ser el predominante evitando zonas amarillentas o secas. De textura fina, sin pieles, y eso hará que tenga un sabor intenso y dulce.
–Alcachofa: Es importante que el tamaño de todas ellas sea parecido, sobre todo no deben de estar deformadas. Debemos evitar alcachofas que tengan hojas marrones o duras. Deben estar tiernas y sobre todo no deben dejar rastro de acidez.
–Pochas: Sabemos si una pocha es de calidad si el balance entre granos verdes y cremas están equilibrados (50% de cada). Es importante que no haya pieles sueltas y que no presenten manchas.
Minimizar la pérdida de nutrientes es el resultado de una toma de decisiones que comienza en el mercado, mucho antes de llegar a la cazuela. Además del tiempo en el que tenemos almacenada la verdura, que en muchas ocasiones, también afecta a sus propiedades nutritivas. El propio transporte y el tiempo que se utiliza para hacer llegar las verduras a sus destinos, influye negativamente en el resultado final de las verduras y las hortalizas.
Por eso, una de las mejores opciones es la verdura congelada, que se recolecta y ultracongela en el mismo día, manteniendo todos sus nutrientes hasta el momento del consumo.
El proceso de ultracongelación somete a las verduras a tratamientos de corta duración que hace que mantengan las propiedades nutricionales, intactas, durante más tiempo.
4 trucos para que tus verduras no pierdan sus nutrientes al cocinarlas
- Cocinar con muy poca agua o sin ella, es la mej or manera para mantener todos los nutrientes en las hortalizas. La cocción al vapor o en el microondas son las mejores maneras de mantener la verdura con toda su esencia, sin alterar ni nutrientes ni vitaminas. Si tu elección es hacerlo al horno, recuerda que la temperatura debe ser alta, y el tiempo corto.
- Un salteado de verduritas es perfecto para cualquier comida, y la pérdida de nutrientes casi ni se percibe.
- Ahora, si lo que te apetece es hacer cualquier variedad de verdura frita. Recuerda que un buen aceite de oliva es el complemento ideal. Ahora, también es cierto que si la temperatura, el aceite y la duración son adecuados, las propiedades del alimento se conservan muy bien porque la costra que lo envuelve mantiene el agua dentro. Pero recuerda que el valor calórico aumenta por la absorciónn del aceite.
- Y aunque se ha puesto muy de moda hacer verduras a la brasa, debes saber que a destrucción térmica y los jugos que se producen provoca la pérdida de nutrientes especialmente cuando hay llama, porque se generan compuestos que adheridos al alimento pueden ser peligroso para la salud si se toman en exceso.
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