- El escritor Daniel Franco Sánchez (Barranquilla, 1997) publicó hace poco más de un mes Análogo al silencio, la primera novela de la editorial Graviola y la segunda que el autor colombiano saca a la luz.

El argumento de la historia se encuadra en los días posteriores al plebiscito por la paz en Colombia, en el año 2016, y gira en torno a una conversación entre Agustín del Río, un joven locutor de radio, y Alfonso, su abuelo paterno. La visita, que en un principio el protagonista afronta como un acto de solidaridad para con el anciano, termina convirtiéndose en un episodio catártico para el nieto. Alfonso “que no fue el más santo de todos”, como afirma Agustín en el texto, sirviéndose de sus recuerdos, unas cuantas fotografías y algunas canciones, le cuenta a su nieto la historia de su vida.

“Quería una historia que reflejara el proceso de redescubrimiento personal a través de la historia del otro, buscar las mejores maneras para comenzar un diálogo, identificar las cosas que heredamos y entender que siempre está en nuestras manos la decisión del cambio”, reflexiona el autor.

La novela, que vio la luz el pasado 27 de mayo, es fruto de varios años de trabajo tanto creativo como administrativo. El verano antes de venir a estudiar a la Universidad de Navarra, estuvo una semana conversando con su abuelo y grabó varias horas de diálogo que fueron de gran ayuda para cuando comenzó a escribir.

Ya con el proyecto de novela en marcha, conoció a Abraham Valera y a Virgilio González en la facultad de Periodismo. Los tres amigos, que comparten el gusto por la literatura y las artes, decidieron montar su propia editorial. “Tenemos ciertos conocimientos, tenemos obras para publicar y amigos talentosos: esto no es mero capricho, podemos hacer algo valioso”, fue la reflexión de los integrantes de Graviola antes de fundarla.

“No somos unos chicos indie, tenemos un criterio editorial bien sustentado y queremos editar a otros escritores latinos”, explica el autor. Pues lo que distingue a Graviola de las demás editoriales es su compromiso con la difusión de autores latinos afincados en el extranjero. Asimismo, entienden la literatura como un puente entre las artes y las culturas. Cosa que queda patente en la primera novela de su catálogo. Análogo al silencio está ilustrada por la artista colombiana Mariana Loewy, tiene un enlace para escuchar en spotify las canciones mencionadas en la historia y ha sido publicada en formato digital. “Sin duda el mundo va para allá, estamos seguros y tranquilos con eso”, alega Franco.

Este compromiso con las nuevas plataformas y los distintos lenguajes creativos también se constata en la cuenta de Instagram de la editorial (@editorialgraviola), donde la inquietud artística de los tres estudiantes queda plasmada en las publicaciones de collages acompañados de poemas o de microrrelatos inspirados en fotografías.

En cuanto al futuro, ya tienen una proyección de obras para publicar hasta finales de 2021. La próxima será una antología de relatos titulada Ya están las arepas, de Abraham Valera, cofundador de Graviola. Otras autoras relacionadas con la editorial son la argentina Agustina Sánchez, la colombiana Laura Estrada y la venezolana Beatriz Mójer.

En el blog de la página web (https://www.editorialgraviola.com/blog), se pueden leer poemas, cuentos y artículos de los autores y los editores, para que los interesados conozcan sus estilos. Con este ánimo, esta semana y durante el mes de julio, arrancan con un ciclo de cuentos en el que colaborarán ilustradoras navarras dando forma y color a los cuentos de los autores latinos.

“Cuando compones una novela corta debes escribir con una precisión exagerada”

Escritor