En 2022 se cumplen 800 años de la mayoría de edad de Teobaldo I y el 5 de mayo marca el 788 aniversario de su coronación como rey de Navarra en la catedral de Pamplona. Con motivo de ello el historiador Xabier Irujo (Caracas, 1967), Premio Gernika por la Paz y la Reconciliación en 2019, presentó ayer la pionera obra Teobaldo I de Navarra. Vida y obra del poeta que quiso ser rey, publicada por la Editorial Vasca EKIN Argitaletxea.

Concretamente, nos encontramos ante la primera traducción completa de 62 de las trovas del monarca al castellano, después de cinco años de investigación y trabajo con las fuentes medievales y siguiendo los primeros pasos dados por Higinio Anglés, que publicó en 1973 dichas obras. El historiador explicó que Anglés “tradujo la primera estrofa de muchas de sus composiciones”. Irujo se propuso a sí mismo “concluir este trabajo”, que comenzó cuando estudiaba filología entre 1990 y 1991. Sin embargo, perdió aquellas primeras traducciones en uno de los ordenadores de la época. “Siempre tuve esa espina y hace cinco años me propuse comenzar de nuevo con las traducciones, y terminar el trabajo”, prosiguió.

Conde de Champaña y de Brie, Teobaldo era uno de los doce pares de Francia. Hijo de Blanca de Navarra y sobrino de Sancho El Fuerte, a la muerte de este fue coronado rey de Navarra. En palabras de Irujo “existen buenas biografías de este rey”, por lo que en esta obra se ha centrado “en la información que aportan las fuentes francesas sobre su juventud, procurando aportar cierta luz sobre el contenido y los temas de su obra”. El libro contiene un estudio preliminar de los poemas del rey, que era un trovero, un poeta que escribió, cantó y compuso su obra en langue d’oil, el grupo dialectal que incluye al francés moderno.

Irujo ha traducido 62 obras “respetando al máximo el texto original”. Por tanto, “no se trata de traducciones libres”; sino que ha intentado “ser muy fiel al texto original, interpretando el sentido de sus palabras en ell contexto lírico de su época”, aunque no ha podido “conservar la rima ni la métrica originales”. Estas 62 composiciones y otras pocas atribuidas y atribuibles al autor constituyen uno de los corpus poéticos más numerosos de cuantos se han conservado de trovadores y troveros.

de extraña nación

Teobaldo I fue coronado rey y calificado como de extraña nación y de extraño lenguaje. “Podemos decir que, una vez coronado rey, tuvo que aprender a acatar la ley y a obedecer, algo a lo que no estaba acostumbrado como conde de Champaña y de Brie”, apuntó Irujo, añadiendo que “Teobaldo, un hombre de letras muy culto, encajó perfectamente en una corte en la que florecía un románico que daría lugar a una de las más ricas manifestaciones del gótico europeo”. Además, la corona y sus recursos financieros le permitieron dedicarse en cuerpo y alma a su pasión, la música y la poesía.

crítica a las cruzadas

De acuerdo con Irujo, “una de sus cualidades como rey de Navarra fue su apuesta por la paz”. Se mostró muy crítico con las cruzadas en sus trovas. Irujo indicó que algunas de sus trovas de cruzada son composiciones “de mucho dramatismo, una gran profundidad, lirismo y actualidad”. Alguna de ellas fue escrita a la vuelta de la cruzada de 1239 y en ellas critica la guerra y el sufrimiento y las atrocidades que le son consustanciales.

Además, criticó amargamente la política inquisitorial de la Iglesia en Occitania. Por sus críticas a las cruzadas y a la Iglesia, Teobaldo I murió excomulgado, pero esto no impidió que fuese enterrado en la catedral de Pamplona, donde sin embargo ya no descansan sus restos, ya que su tumba fue destruida durante la Guerra de la Navarrería de 1276. l