A finales de mayo del 2021, miembros del Proyecto Zorzales se desplazaron a Navarra para capturar un macho y una hembra de esta especie y colocarles sendos dispositivos GPS, en una acción pionera en España. La Comunidad foral fue la región escogida para ello, debido a que cuenta con poblaciones sedentarias y reproductoras de zorzal común. Uno de los objetivos que se perseguía con esta operación era averiguar si estas aves suelen emprender migraciones hacia la zona sur del país durante los meses de invierno.Con la colaboración de la Federación Navarra de Caza y del Gobierno de Navarra, se pretendía monitorizar los movimientos de los dos zorzales, para tratar de entender mejor el comportamiento de esta especie, una de las aves de caza menor más valoradas por los cazadores.

El sistema GPS que porta los collares que se colocaron en los dos ejemplares capturados en Navarra se alimenta con energía solar, gracias a un pequeño panel que lleva adosado. Revela información de manera periódica, en función de la luz que recibe del sol. Sin embargo, su elevado coste (cada uno de ellos supera los 1.000 euros) hace que no se pueda colocar a un gran número de aves. La previsión que los organizadores del Proyecto Zorzales manejaban en el 2021 era que, durante los cuatro años de vida del estudio, se marcaran con estos dispositivos a una veintena de aves.