- Los clubes de Segunda B han vivido una semana de incertidumbre. El lunes iniciaban la semana con normalidad, el martes pensaban que jugarían a puerta cerrada y el miércoles ya conocieron que no iba a haber partido este fin de semana. El parón, a priori, es por quince días, lo que no les permite bajar el ritmo si quieren volver estar a tope el 29 de marzo.

No habrá derbi entre Tudelano e Izarra, ni partido de Osasuna en Tajonar contra el Guijuelo. No se sabe quién será el rival cuando se reanude la Liga. Ni siquiera existe la certeza de cuándo se volverá a competir. Pero esa suspensión de 15 días les obliga a estar preparados por si la competición regresa ese día y no van a parar de entrenar.

En el Izarra, la normalidad se mantiene en los entrenamientos. “Estamos entrenando para mantener la forma, eso sí, a puerta cerrada. Hemos cambiado algún aspecto y hemos extremado las medidas de higiene. La idea es seguir entrenando estas dos semanas a la espera de lo que pase, porque esta situación genera incertidumbre. Toca esperar y estar tranquilos y tomar medidas de higiene”, comenta el entrenador, Pablo Álvarez. El técnico lamenta que esta situación haya llegado cuando el equipo transmitía sensaciones positivas. “Estábamos en un buen momento de forma. Nunca se sabe si este parón es para bien o para mal y, por supuesto, la salud está por encima de todo”.

En Osasuna Promesas se da la circunstancia de que el equipo había acumulado tres sesiones de entrenamiento, por lo que el equipo está de fiesta hasta el lunes. “Nosotros entrenamos lunes, martes y miércoles, y ya una vez que se supo la noticia de que no íbamos a jugar dimos fiesta hasta el lunes. A partir del lunes planificaremos cuatro o cinco entrenamientos y dejaremos el fin de semana libre. Esa es nuestra idea, al menos. Contamos con que la competición vuelve el 29 de marzo y queremos estar preparados para entonces. No se sabe lo que va a pasar, pero nuestra obligación es estar preparados por si la competición se reanuda en dos semanas”.

Es una situación atípica. “Durante tres semanas habíamos entrenado tres días consecutivos. Pensábamos descansar jueves y volver el viernes, pero si no hay competición no tiene sentido y por eso hemos dado cuatro días de fiesta, que a estas alturas de temporada no supone mucho”.

Quiere que su equipo esté a tope cuando vuelva la Liga. “La temporada en global está siendo buena, pero hay que terminarla bien. No podemos dejar pasar los diez partidos que quedan como si nada. Tenemos que estar igual o mejor que lo que hemos estado hasta ahora. Acabar bien la Liga es tan importante como lo que hemos hecho anteriormente. Que los jugadores cuando se vayan de vacaciones lo hagan con la tarea hecha”. Y concluye: “Lo ideal es que se juegue después del 29, pero hay cosas más importantes de lo que es el fútbol en estos momentos. Estamos tranquilos, pero a la espera”. Mientras tanto, siguen las recomendaciones del club “ y los consejos a nivel nacional y a nivel provincial. Dentro de nuestras posibilidades contribuir a que esto no se expanda más. Hay que ser responsables individualmente. Ante una situación nueva no hay que alarmarse, pero hay que hacer lo que te dicen, no sólo por ti mismo sino por los de alrededor, porque puede haber personas en estado de vulnerabilidad”.

En el Tudelano, Nacho Martín mantiene la preparación en el equipo ribero. “Mañana (por hoy) y el sábado teníamos entrenamientos y, salvo que haya novedad de última hora, los mantenemos. El domingo, como no hay partido, descansamos. Después, lunes, martes y miércoles tenemos previsto seguir entrenando. Mientras no nos lo prohíban, continuamos los entrenamientos con normalidad a día de hoy”. Nadie sabe el alcance de la medida. “Vamos a esperar si la suspensión de las jornadas queda en dos jornadas o a ver qué decisiones se toman, pero las decisiones son complicadas. Primero hay que saber el tiempo que va a durar el parón. Si son dos o tres semanas, se retomará. Si va para largo, habrá problemas. Lo último que sabemos es que el día 29 habría Liga, así que trataremos de estar bien preparados para ese día”.

Ningún momento es bueno para un parón, pero esto es inevitable. “A mi equipo lo veo bastante bien y en línea ascendente, pero es una variable que no podemos controlar. Es lo que hay. A ver qué nos dicen los que mandan”. Todos pendientes.

“Estábamos en un buen momento de forma, pero la salud está por encima de todo”

Entrenador del Izarra

“Nuestra obligación

es estar preparados

por si la competición se reanuda el 29”

Entrenador de Osasuna B

“Mientras no nos lo prohíban, nosotros vamos a seguir entrenando.

Ya veremos

qué pasa”

Entrenador del Tudelano