- Si las opciones de que Osasuna pueda abrir parcialmente las puertas de El Sadar el próximo 24 de octubre, fecha de su centenario, ya eran escasas por la negativa del Consejo Superior de Deportes (CSD) a permitir el acceso de público a los estadios de fútbol en España al menos hasta enero de 2021, desde ayer lo son más después de las restricciones anunciadas por el Gobierno de Navarra en su intento por contener el avance del covid-19 en la comunidad.

Y es que entre las medidas que adelantó la presidenta María Chivite, que estarán vigentes entre el 13 y el 27 de octubre (es decir, durante 14 días a partir de mañana mismo), se encuentra una que añade más trabas a los planes que persigue Osasuna. “Las actividades deportivas profesionales se realizarán sin público”, decía la nota que publicó ayer el Ejecutivo y a la que le falta el acompañamiento preciso del texto de la orden foral que hoy tiene previsto publicar Salud en el Boletín Oficial de Navarra (BON).

Aunque los partidos correspondientes a la sexta jornada de la Liga de Primera División, cuya disputa está prevista para el fin de semana del 24 y 25 de octubre, aún no tienen señalamiento oficial, lo cierto es que Osasuna ya anunció hace varios días su intención de solicitar a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) que su duelo contra el Athletic en El Sadar se dispute el sábado 24 de octubre, con el fin de hacerlo coincidir con la celebración de su centenario. El club, a través de su presidente, Luis Sabalza, también adelantó recientemente su propósito de pedir un permiso especial para que, en una fecha tan señalada, un reducido grupo de socios (en principio, los más veteranos) pudiera disfrutar del encuentro contra el Athletic en la grada, eso sí, cumpliendo escrupulosamente con el protocolo sanitario (uso obligatorio de mascarillas, desinfección de manos, distancia social...). Sin embargo, todos estos planes, ya complicados de salida, se torcieron ayer un poco más por el recrudecimiento de la pandemia de covid-19 en Navarra y por las medidas restrictivas que va a aplicar el Ejecutivo foral.

Aunque en Osasuna ven complicado conseguir su objetivo de abrir parcialmente al público las puertas de El Sadar el próximo 24 de octubre, lo cierto es que las fuentes consultadas ayer no se encontraban en disposición de asegurar nada al respecto. Y es que la decisión final va a depender del CSD (con la LFP como interlocutora del club) y también del Gobierno de Navarra, dueño del estadio y que quiere contener la pandemia durante al menos los próximos 14 días, algo que no parece compatible con la presencia de público en las gradas.