BETIS Claudio Bravo; Emerson, Mandi, Víctor Ruiz, Álex Moreno; Guido Rodríguez (William Carvalho, m.66) , Guardado; Diego Lainez (Juanmi, m.66), Fekir, Canales; y Borja Iglesias (Joaquín, m.90).

LEVANTE Aitor Fernández; Miramón (Duarte, m.83), Róber Pier, Vezo, Clerc; De Frutos, Morales (Son, m.77), Vukcevic (Maisa, m.77), Bardhi; Dani Gómez (Sergio León, m.77) y Roger.

Goles 1-0, m.70: Fekir. 2-0, m.75: Juanmi.

Árbitro Jesús Gil Manzano (Comité Extremeño). Amonestó a los locales Guido Rodríguez (m.57) y William Carvalho (m.84).

Estadio Benito Villamarín.

El francés Nabil Fekir, con un gran gol que puso el 1-0 en el minuto 70, y Juanmi Jiménez, poco después de ingresar al campo, desatascaron el juego del Betis en la segunda parte para que retomara la victoria y siga asentado en los puestos europeos, a los que no pudo acercarse el Levante, que controló bien la situación hasta que encajó los tantos.

Al descanso de este partido se llegó con empate a cero, con equilibrio de fuerzas y sin grandes ocasiones de gol, pero en la segunda, cuando el guión era muy parecido, llegó el tanto del internacional galo, lo que dejó sin reacción al conjunto valenciano.

La segunda mitad se había iniciado como la primera, con igualdad, llegadas a las dos áreas y una fuerte pelea en el centro del campo en la busca de encontrar el dominio en juego, pero Pellegrini no lo vio claro e hizo ingresar de una tacada a William Carvalho y Juanmi Jiménez por Guido Rodríguez, que tenía una tarjeta, y Lainez.

Tras esos cambios llegó el tanto bético, pero fue de Fekir, quien hizo una gran jugada en solitario en la que se fue de varios contrarios y batió al meta Aitor Fernández a los setenta minutos, lo que desatascó a su equipo, hasta el punto de que cinco minutos después, en el 75, Juanmi metió el segundo para los locales.

Los goles hicieron que Paco López también moviera su banquillo para el tramo final del encuentro con un triple cambio, al entrar Son, Maisa y Sergio León, pero ya el partido estaba cuesta arriba y el Levante nunca dio la sensación de poder arreglar la situación.