El primer ministro francés, Jean Castex, regaló ayer al papa Francisco una camiseta que seguramente aún no tenía: la firmada por el astro argentino Lionel Messi con su nuevo equipo, el Paris Saint Germain. La elástica número 30 firmada por Messi y enmarcada fue el inusual regalo de Castex al pontífice en una reunión conmemorativa de las relaciones Vaticano-Francia.