El Navarra Arena volvió a vibrar con el Lurauto MG X-Gravity cuatro años después de su primera visita a Pamplona. El espectáculo llenó las gradas del recinto con un público entregado a los saltos y acrobacias de los riders y rollers. Edgar Torronteras, Maikel Melero o Alex Gonga mostraron su habilidad con saltos de hasta 25 metros de altura, en el caso de las freestyle motocross.

Las largas colas a la entrada del Navarra Arena minutos antes eran presagio de lo que más tarde se viviría dentro. Con la presentación de los riders y los juegos de luces, el ambiente se puso a tono para las primeras acciones.

Antonio Navas fue el encargado de inaugurar la fiesta y lo hizo por todo lo alto. Un superman y un backflip fueron los trucos más destacados de sus cinco intentos. Greg Rowbottom y Pedro Moreno dieron la talla con varios saltos de gran nivel, pero el que levantó a la gente de sus asientos en cada salto fue Edgar Torronteras. El veterano piloto, campeón del Red Bull X-Fighters y cuatro veces medallista en los X-Games, dejó claro desde el primer salto -un whip one hand- su candidatura a llevarse el premio de la noche. Los favoritos Maikel Melero y David Rinaldo cerraron la ronda de freestyle entre aplausos y gritos de ánimos.

El jurado, entre los que se encontraba Dany Torres, ídolo de la disciplina y que en 2018 deslumbró con sus acrobacias en el Navarra Arena, no lo tuvo nada sencillo para decidir al vencedor.

A continuación, las BMX y un scooter y un roller, demostraron que no hace falta tener motor, ni hacer ruido para dar espectáculo. El jovencísimo Alex Gonga realizó varios backflips con su scooter, Eder Álvarez clavó los aterrizajes sobre los patines y Diego Solans, Ignasi Pascual, Ibai Gaztelumendi y el navarro Arkaitz Armendariz mostraron la versatilidad de las BMX.

A la gran final de la noche, donde el público decidía el absoluto ganador del X-Gravity, llegaron los mejores de cada disciplina. Por las scooters el representante fue Alex Gonga, en las BMX, Diego Solans logró colarse en la gran final, en los rollers fue Eder Álvarez y en las motos hubo un empate ante la calidad de los saltos. Los dos grandes favoritos, David Rinaldo y Maikel Melero, llegaron tras dos rondas igualados por la decisión del jurado.

La complicación y el desafío que suponieron sus trucos obligaron a los jueces a meterlos a los dos en la final. El público tenía la última palabra y las motos son lo más espectacular. El francés David Rinaldo sacó todo su arsenal, pero no pudo superar a un Maikel Melero que llevó el reto un paso más allá. El manchego planchó un doble backflip por primera vez en una competición para llevarse el reconocimiento de los espectadores y el premio al campeón del X-Gravity.