pamplona - La siniestralidad laboral frenó su subida en el segundo trimestre del año en Navarra al registrarse 2.157 accidentes, un 9,2% menos que en el mismo periodo del año anterior, según el informe elaborado por el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN). “Es una buena noticia, pero hay que tomar el dato con cautela. Debemos esperar el comportamiento de los próximos dos trimestres para comprobar si este descenso se consolida”, explica Iñaki Moreno, jefe de Servicio de Salud Laboral del Gobierno de Navarra.

La siniestralidad ha descendido en todos los sectores, siendo pronunciada en los servicios. Esta caída también se ha detectado en los accidentes in itinere -durante el desplazamiento entre el centro de trabajo y el domicilio-. “En este segundo trimestre coincidió la celebración de la Semana Santa, un paréntesis vacacional que puede haber influido en esta bajada”, advierte Muñoz.

La disminución de los accidentes entre abril y junio ha contribuido a que el resultado de la siniestralidad mejore en el primer semestre, a pesar de que se han contabilizado un 1,5% más de accidentes que en el mismo periodo de 2016.

El ISPLN señala que el índice de incidencias en el primer semestre ha sido de 18 accidentes por cada mil trabajadores; cifra que se mantiene prácticamente igual que en 2016. “Habrá que ver si este valor marca el inicio de una tendencia en los siguientes trimestres o se trata de un fenómeno coyuntural influido por otros posibles factores como el trimestre en el que se ubica el periodo vacacional de Semana Santa, de menor actividad laboral”. El Instituto resalta que “estos índices aumentan en industria -pasa del 28,4 al 29,7- y en agricultura -del 22,8 al 23,9- , y disminuyen en la construcción -de 40,2 a 35,5- y en servicios -de 12,1 a 11,7-”.

El incremento de la siniestralidad durante estos años en la Comunidad se ha debido “al recorte en las plantillas y a la subida de la actividad en una primera fase; y a la contratación de personal más joven, a la reforma laboral, al perfil mayoritario de microempresa y al sistema preventivo estatal que suma 20 años”, analiza Moreno. “Hay que trabajar de otra manera la prevención para que se amolde a cualquier escenario”, dice.

Además, el índice de incidencia de los accidentes mortales ha pasado de 0,022 en 2016 al 0,030 este año durante el primer semestre, que supone un aumento del 13,6%. “Este dato preocupa y hay que actuar sobre él”, remarca. “Los accidentes graves han presentado un descenso muy marcado de un 44% pasando de un índice de 0,16 accidentes por cada mil trabajadores en 2016 a un 0,09 accidentes por cada mil trabajadores”, explica.

arranca la iniciativa El jefe de Servicio de Salud Laboral, Iñaki Moreno, recuerda que a partir de septiembre va a comenzar la visita a unas 700 empresas y a 200 obras de construcción “para identificar riesgos, según los criterios técnicos del equipo de casi 25 personas del Instituto”. En los próximos tres meses, realizarán un trabajo de campo en 350 empresas de entre 11 y 250 empleados, y en otras tantas de menos de diez trabajadores. “Queremos corregir las malas prácticas y hacer recomendaciones individualizadas para cada compañía”, dice. Esta manera de actuar supone un cambio, ya que antes el Instituto solo se centraba en las empresas que actuaban de manera incorrecta, y ahora amplía su listado a más.